La farmacéutica María Teresa Ares abordó el papel de la farmacia comunitaria ante la violencia de género “La farmacia: estás en lugar seguro”, dentro del programa de conferencias organizadas por la asociación Curunda y el Ayuntamiento de Rionegro del Puente, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres y niñas. Los números de teléfono donde pedir ayuda son 016 y 012 de Castilla y León.

María Teresa Ares, Tesorera del Colegio de Farmacéuticos de Zamora y farmacéutica de Mombuey, trató el papel de las Farmacias en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Señaló que esta violencia “no es un tema privado, es un tema de todos”. La incorporación de la mujer en el ámbito laboral ha sido importante en Farmacia, “ocupamos unas cuotas de participación muy alta”.

En Castilla y León el 90% de las farmacias del ámbito rural está regentada por mujeres. Una mujer maltratada “va a encontrar la cara de una mujer”. No nos podemos quedar de lado cuando vemos situaciones incompatibles con la sociedad. En 2018 las farmacias, a través del Pacto de Estado y en la pandemia eran uno de los lugares donde podía salir y alertar con pedir “mascarilla 19” en relación a un caso de violencia de género, desde donde se pondrá en marcha un protocolo para ayudar a la víctima.

"La mujer sometida a violencia acude más a los servicios sanitarios y también a la farmacia"

Desde julio pasado la farmacia es una plataforma informativa, y un punto violeta de seguridad, donde se exhibe una pegatina identificativa y con código Q de cómo actuar. Herramientas para detectar posibles casos tanto de mujeres como niños, tanto en la salud como en desarrollo sicológico. Está demostrado, según Ares, “que la mujer sometida a violencia acude más a los servicios sanitarios y también a la farmacia”. Hay dificultades porque la víctima siente miedo, se siente culpable y no es consciente de ser víctima.

En el medio rural se produce también una máxima vulnerabilidad porque no tienen la misma posibilidad de acceso a los recursos. Cuando una mujer está en la farmacia puede haber indicadores físicos –cefaleas, mareos, dolores abdominales, etc- y en la atención con la farmacéutica salta la alerta. Además, hay síntomas sicológicos como el abuso de fármacos, insomnio, intento de suicidio, culpa, trastornos alimentarios y mujeres que acuden muchísimo a los centros de salud o abandonan los tratamientos.

Un momento durante la charla. | A. S.

Tipos de violencia

La psicóloga Lola Fernández Barrio profundizó en “Cómo detectar y afrontar la violencia contra la mujer”. Como concepto general la violencia de género es todo acto de violencia contra la mujer, la ejerza quien la ejerza.

Explicó los tipos de violencia de género: física, psicológica, sexual, económica, patrimonial, social y vicaria. El primer paso “es pedir ayuda” a familiares y conocidos. La persona que preste ayuda “debe escuchar y no juzgar”. Para salir de esas situaciones “hay que tener mucha fuerza de voluntad”. La víctima “no ve salida aunque tú lo veas clarísimo”.

El ciclo de la violencia pasas por una acumulación de tensión, estallido de la tensión y luna de miel que es el arrepentimiento “que no lo hará”. Ahora “hay muchos recursos” para salir de esa situación de maltrato. Una de las acciones que se puede llevar a cabo es combatir los micromachismos como rechazar chistes machistas.

La violencia vicaria es la que se ejerce sobre los hijos para hacer daño a la mujer. Desgranó la diferencia de violencia de género con sexismo, machismo y misoginia. “Nadie está libre, ni tu ni yo. Desde dentro es muy difícil y más teniendo cuatro hijos” describió una de las participantes. Testimonios duros de vivencias en el medio rural y la desprotección a la víctima. Violencia psicológica tiene “siete barrotes”: degradación, cosificación, intimidación, sobrecarga de responsabilidades, distorsión de la realidad, aislamiento y estrategia defensiva.