La iglesia parroquial de San Miguel Arcángel de Sarracín de Aliste se reabrirá al culto el próximo día 11 de junio tras permanecer cerrada durante más de tres años debido a su lamenta. Amenazaba ruina total y no garantizaba la seguridad de los feligreses.
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Día 7 de abril de 2019. Fue la fecha, ya en las puertas de la Semana Santa, en la que las autoridades religiosas y civiles, decidían cerrar temporalmente el recinto religioso al considerarse que la celebración en él de misas, rosarios, bautizos, bodas, comuniones o funerales, era una auténtica temeridad pues la estructura que sujetaba la techumbre se estaba saliendo de las paredes y en cualquier momento podía caer encima del cura y los feligreses.
Germán Matellán Fernández, alcalde del Ayuntamiento de Riofrío y natural de Sarracín sentencia: “era una evidencia a simple vista que la techumbre estaba cediendo muy peligrosamente. Ello nos llevó a indagar quitando parte del bajo techo y la sorpresa fue mayúscula pues descubrimos que varias de las vigas se estaban saliendo de su lugar de anclaje original en las paredes exteriores y muros de carga. En cualquier momento el tejado podía venirse abajo y causar una tragedia”.
Las prisas nunca fueron buenas consejeras ni compañeras de viaje. Se contrataron las obras de prisa y corriendo por parte del Obispado de Zamora pero hubieron de paralizarse acto seguido al descubrirse que la situación estructural de la iglesia era mucho más grave de lo que en principio parecía. A partir de ahí la rocambolesca historia fue de sorpresa en sorpresa. En un principio se pensó que harían falta 120.000 euros para recuperar el templo, pasadas dos semanas las cuentas volvían a dispararse y ya se hablaba de unos 135.000. Tras redactarse el proyecto las necesidades se iban a 155.000 euros
La iglesia de Sarracín, en ruina
Germán Matellán Fernández (alcalde) y Javier Fernández (concejal), junto al cura, tomaron cartas en el asunto y finalmente lograba firmarse un convenio entre la Diputación de Zamora y el Obispado con una inversión económica de 186.062,79 euros
La iglesia de San Miguel Arcángel de Sarracín fue una de las últimas construidas en el Arciprestazgo de Aliste. Los vecinos recuerdan que las obras se iniciaron e hicieron en su mayor parte a lo largo del año 1957, pero en realidad luego no se abría al culto hasta 1961.
Sarracín de Aliste pagó el experimento de un excura, Laureano, de Fonfría, que tras colgar los hábitos, decidió reconvertirse en constructor hasta convertirse en los años ochenta en uno de los más importantes de España. Sin embargo tanto la de San Miguel de Sarracín como la de Valer (construida en 1961 y abierta en 1962), –pagaron su novatada y picaresca–, fueron un auténtico despropósito y en sus seis décadas de vida “han sufrido tantas obras que nos habría salido mejor haberlas hecho nuevas”.
Un octogenario de hoy, mozo y ayudante de albañil de entonces aseveraba ayer: “venía el camión con cemento por la mañana y Laureano por la tarde y se llevaba la mitad con su coche. Luego, arena de arroyos y poco cemento, pues como iban a quedar bien las cosas. Imposible”.
La Diócesis de Zamora fue la encargada de contratar las obras del templo parroquial, cofinanciadas por la Diputación Provincial de Zamora, a la empresa Zacosal, de Bercianos de Aliste, que ejecutó magníficamente las obras de restauración y recuperación tendentes a recuperar la techumbre y acondicionar el interior.
El bajo techo se ha situado más bajo y se ha renovado parte del piso del edificio religioso. Asimismo se ha adecuado a los tiempos y a las necesidades, tanto la iluminación del templo alistano como el sonido.
Algún funeral en la calle por la pandemia
Culminada la restauración pactada, había de afrontarse una “segunda fase”, para restaurar el centro parroquial, edificio adosado en la parte izquierda del templo, obras costeadas por la cofradía del “Santísimo Cristo”. Había que culminar todos los exteriores, pared del lado derecho. La propia empresa Zacosal ha realizado los trabajos de retirada del lucido de cemento, para proceder a dejar la piedra a cara vista. Se finalizará esta semana con la limpieza y rejuntado de los ladrillos de cara vista del campanario.
El Ayuntamiento de Riofrío tendrá que ser quien finalmente costee los alrededor de 8.000 euros necesarios para ello. Al final recuperar la iglesia superará los 180.000 euros. Sarracín de Aliste tiene entre sus celebraciones más importantes del año la festividad de “San Antonio” (Patrono de los Mozos) donde cada 13 de junio los varones solteros le cantan el ramo y lo portan en procesión.
Día grande
Tras no poder celebrarse ni en 2020 ni en 2021, –en la iglesia tampoco en 2019–, este año el día grande se adelantará al sábado 11 de junio y se hará coincidir con la reapertura al culto del templo de San Miguel. Autoridades y feligreses ya han mostrado su deseo de que la celebración religiosa esté presidida por el obispo de Zamora Fernando Valera. Asimismo participaran todos los últimos párrocos que pasaron por el pueblo en los últimos años.
Desde la muerte del histórico “cura de Sarracín”, Manuel Morán: Manuel Iglesias, Matías Pérez, Héctor Galán y Fernando Lorenzo. A ellos se unirán otros como y Fernando Ruiz (Fonfría) y Pedro García. San Antonio volverá a ser venerado en la iglesia de San Miguel Arcángel el día 11 a las 12.30 horas (inauguración), con el canto del ramo por parte de los mozos y la actuación de “Manteos y Monteras” cuya coral cantará la Misa Zamorana.
Por la noche habrá verbena popular con la orquesta “Expresión”. El día 12 habrá misa, bailes y merienda para todo el pueblo. Atrás quedan 37 meses donde los actos religiosos se han venido celebrando en el centro social (antiguo salón de baile), donde, dada su reducido espacio, y al compartir entrada con el comedor social de la tercera edad, llevó a situaciones como la de tener que celebrar durante la pandemia algún funeral en plena calle: frente al tanatorio.