La delegada territorial Clara San Damián y el diputado provincial de Medio Ambiente Javier Faúndez han analizado el estado del proyecto “Territorio Rural Inteligente”, un programa orientado al desarrrollo rural de la provincia desde la mejora tecnológica en campos como la recogida de vidrios, la gestión de agua o el alumbrado público.
En concreto, los representantes de las dos insituciones han valorado las nuevas actuaciones que se pondrán en marcha en la provincia en lo relativo a la recogida de vidrio, acciones que se enmarcan dentro del territorio rural inteligente, una "plataforma de software para gestión inteligente de agua, alumbrado y recogida de residuos", según ha explicado la delegada y que el diputado provincial ha tachado como parte "de un proceso de colaboración histórica".
Esta teconología funciona a través de sensores que se instalan, por ejemplo, en los contendeores de basuras y permiten controlar su estado y ofrecen una conectividad completa con los servicios de recogida.
"El objetivo es por un lado reactivar la economía en el mundo rural y sobre todo cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible marcados desde la Unión Europea", ha confirmado San Damián.
Estas son algunas de las áreas "más importantes en materia ambiental", según ha destacado la delegada, y ha destacado las líneas para la extinción de escombreras o las mejoras de la calidad de aguas y vertidos, dos puntos "clave" para el desarrollo rural de esta provincia.
Recogida de basuras optimizada en el medio rural
"Fuimos prácticamente pioneros a nivel nacional en 2020 cuando instalamos un centenar de sensores en los contenedores de vidrio", ha detallado Faúndez sobre una teconología que permite mandar una alerta a los servicios de recogida que optimiza este servicio de cuando el contenedor está lleno, así como su ubicación GPS o la temperatura a la que está, función clave para evitar posibles incendios en los pueblos, muchos de ellos parte de reservas.
Ahora, Junta y Diputación presentan la segunda fase de este proyecto orientada en mayor medida a poblaciones en la reserva de Villafafila, La Guareña y la reserva de la Biosfera Meseta Ibérica "zonas que tienen una sensibilidad ambiental", apunta el diputado.
Serán 151 nuevos sensores los que se instalarán, con un total de 267 sensores en la provincia que avisarán "en tiempo real de que ya están llenos".
Aunque apuntan que la señal salta cuando el contenedor se encuentra al 70% para dar "tiempo suficiente de respuesta para ir a recogerlo" a los servicios que se desplazan desde la capital.
La provincia cuenta con 1.215 contendores, y excluyendo a la ciudad de Zamora, la ratio es de uno por cada cien habitantes. Esos 267 sensores se han puesto en aquellos contenedores que se ubican en zonas que tienen un valor medioambiental importante y que están en zonas alejadas de la ciudad, donde se encuentra el centro de recogida.
"Para recoger un contenedor de Villarino Manzanas (municipio alistano fronterizo con Portugal) podríamos ir muchas veces a recoger poco residuo o nada", ha ejemplificado Faúndez sobre la oportunidad que esta tecnología ofrece de confeccionar un servicio de recogida "más eficiente y sostenible".
"Esto ayuda a reciclar, a reutilizar y a promover la economía circular, además de prestar los mejores servicios a nuestros ayuntamientos", ha finalizado el representante provincial.
Municipios de menos de 500 habitantes
Las mejoras en el saneamiento del agua también llegarán próximamente a los municipios de menos de 500 habitantes, próxima fase de intervención en la que ya "estamos trabajando para mejorar la depuración de agua de la provincia", según ha declarado la delegada San Damián y ha anunciado que serán 11 los municipios que darán inicio a este proyecto "de forma inminente".
Una actuación con un importe que supera los 9 millones de euros, presupuesto para afrontar el coste de las estaciones depuradoras que se financia en un 40% por cada una de las dos instituciones, Junta y Diputación, y el 20% restante corre a cargo de cada ayuntamiento.
Otra de las actuaciones dentro de la mejora del medio ambiente han sido las obras de restauración de 54 escombreras. En total ya han sido 112 escombreras mejoradas, y en la provincia solo quedan 22 para la cuarta fase. Una actuación en la que se ha invertido 3 millones de euros.
