La incertidumbre protagoniza este año, más que nunca, la campaña de la huerta en la comarca de Benavente en general y en el Valle del Tera en particular. Las olas de calor, el fuego, el corte de la campaña de riego por las condiciones de sequía están condicionando este año no solo la cosecha de productos como el pimiento sino todo el proceso hasta llegar a ella.

Vecinos y visitantes aprovecharon el mercado del jueves para la compra de pimientos. | E. P.

La falta de riego ha sido determinante para algunos agricultores que ahora sí podrán reanudar con carácter puntual el riego la próxima semana. Así lo comunicaba oficialmente Confederación Hidrográfica del Duero a Subdelegación de Gobierno. El subdelegado de Gobierno, Ángel Blanco, explicó que “es un primer paso y muy importante en este momento clave para la cosecha del pimiento. Estamos en una situación de escasez y sequía prolongada pero las precipitaciones de los últimos días han cambiado las tendencias del sistema del Tera”. El riego será “uno o dos días de la semana próxima”.

Uno de los hortelanos de morrón en el mercado de Benavente. | E. P.

Será los días 22 o 23 de septiembre y la concesión de agua se fija en cinco metros cúbicos por segundo, según explicó también el presidente de la Comunidad de Regantes de la Margen Derecha del Tera, Lázaro Zarza. Podrán así realizar el riego del cultivo de pimiento, coliflor, guindillas, algo de puerro y algunas patatas. “Con la lluvia que ha caído, ahora mismo el terreno aguanta unos días”, indicó Zarza.

Con este riego se cumple “parcialmente” lo demandado por los regantes que están a la espera de ver cómo se desarrolla la campaña los próximos días.

La campaña desde dentro

En Benavente ayer el mercadillo de frutas y verduras se amplió de nuevo, como viene siendo habitual por estas fechas, con los puestos de los hortelanos del pimiento.

Hacían valoración de la campaña de este año. Los cultivadores del morrón con expectativas menos halagüeñas que otros productores. José Carlos, uno de ellos, señalaba que este año “la cosecha del morrón está muy floja y este año no vamos a poder ir a las ferias. Lo sacamos a almacenes y particulares, además de restaurantes. Ahora ya no te preguntan ni por el precio la pregunta es ¿tienes?”.

Señala también que “han sido dos meses y medio de ola de calor, hemos tenido problemas todos, en los productos de la huerta, el cereal, los tomates, en todo. Si a mediados de mayo me lo dicen, no me lo creo. Todo el mes de mayo iba todo perfecto, a finales de julio era ya un desastre”.

Para José Carlos este año no solo el corte del agua sino que la campaña en general “no ha sido buena. La pérdida ya venía también de atrás”.

Otro de los hortelanos de Aguilar, también de pimiento morrón, lamentaba el desarrollo de la campaña. “Nos quitan el riego y luego llueve y nos machaca el fruto. Es un año de decir pasar página y olvidarse de él. En la zona del Tera primero nos quemaron y luego nos quitan el agua”, explicaba. “Si seguimos así desaparecemos”, añadió. Él calcula un mínimo de pérdidas del 70%. “Yo tengo 23.000 plantas de morrón puesto y las previsiones sería de 14 o 15.000 kilos y se van a quedar en tres o cuatro mil”.

Elías también ha estado en el mercado de Benavente con sus pimientos Lamuyo. “Ahora mismo no estoy tranquilo porque tengo mucha cosecha en la finca. No esperábamos una campaña así. Se nos ha juntado todo, y lo peor es que por causas ajenas a ti (con relación al corte de la campaña de riego) tengas que decir no puedo sacar todo el trabajo de un año adelante. Es nuestro pan, nuestro modo de vida, llevamos meses con muchos problemas”.