"El objetivo principal es que nada más entrar a las instalaciones, se reconozca que se ha cruzado la puerta de una escuela donde se imparten distintas ingenierías", argumenta el profesor Manuel Pablo Rubio Cavero para defender esta iniciativa. Para ello han aprovechado un trabajo ya realizado que tiene más recorrido tras su defensa ante el tribunal para obtener el título.

El paso de los años entre unos y otros proyectos también sirve para comprobar los avances tecnológicos con los que ahora se cuenta, que ayudan a que los proyectos "sean más vez más adaptados a la realidad, aunque los temas elegidos sean muy similares. Ahora quedan mucho más vistosos", señala el profesor.

Esta iniciativa podría ir un poco más allá, ya que en la mente de los profesores está la idea de que, puesto que todos los proyectos cuentan con un vídeo explicativo de cada una de las propuestas, se puedan aprovechar también de forma audiovisual. "Todos se componen de un vídeo con una duración de entre cinco y diez minutos, dependiendo del tema, para ver en movimiento todo el proceso que se explica en cada panel. La idea es que, como la Universidad de Salamanca cuenta con sus propios canales de televisión, se podría programar alguna retransmisión para lanzar estos proyectos de fin de grado e incluso, si tuvieran cabida en algún programa, poder entrevistar a los antiguos alumnos para que cuenten todos los detalles de sus trabajos", sugiere Rubio.

"Muchos de los alumnos cuyos proyectos están ahora aquí colgados trabajan ahora en el área del diseño", apunta su compañero Pedro Hernández Ramos, quien enumera a grandes empresas como Airbus o Indra como firmas donde desarrollan su actividad profesional antiguos alumnos de la Escuela Politécnica de Zamora.