Un tren «histórico, inaugurado por un dictador y, de manera incomprensible, con peligro de cierre en manos de un Gobierno democrático del Partido Popular en ayuntamientos, Diputación, comunidad autónoma y Gobierno central». Es la reflexión que hace el senador y alcalde de Puebla, el socialista José Fernández, quien lleva su tesis más allá al argumentar que «lo más curioso de todo, es que esto se ejecuta con una ministra que cuando está en Zamora dice que es de Zamora», reprocha.

Los socialistas envían también un mensaje de apoyo a los empleados del gremio, cuyos puestos de trabajo «desaparecerán si se suprimen todos estos servicios ferroviarios».

En cualquier caso, el PSOE concluye que «no se puede dejar sin servicio a infinidad de pueblos pequeños que, como Abejera, con poco más de 100 habitantes, utilizaron el tren durante el año pasado 874 veces, ya que no tienen otra forma de llegar a los servicios sanitarios, educativos y administrativos de la capital», sostiene.