Pues se ha tomado realmente en serio la Real Cofradía del Santo Entierro lo de contar con un plan de emergencias que permita hacer frente a cualquier incidencia que se presente en un desfile procesional muy largo y con muchísimas personas como participantes cofrades y espectadores. De hecho es la primera cofradía de Castilla y León, y posiblemente de España, que tiene un plan de emergencias sanitarias para su desfile procesional. Los elementos para ello son la dotación de varias camillas en algunos de los grupos escultóricos, la presencia de personal sanitario y tres desfibriladores para poder actuar en caso de que se produjera alguna parada cardiorespiratoria.

El Plan de Emergencias y Evacuación, no solo consiste en llevar más o menos material, sino que incorpora la formación de los miembros de la organización de la procesión para que estén preparados ante cualquier eventualidad. Uno de los factores que se ha tenido en cuenta es que el tiempo es fundamental a la hora de asegurar la cadena de supervivencia en un soporte vital básico. La procesión puede llegar a un kilómetro de extensión, indican los responsables del plan de emergencias, por lo que la medida de colocar desfibriladores bajo los pasos resulta adecuada. Para ello han contado con la colaboración del "Proyecto Salvavidas" que entregará los equipos el próximo 18 de febrero.