Las medicinas al pensionista le van a costar solo 8 euros al mes que equivalen a 4 cafés». Son las palabras de Echániz y L. F. Rudi, dos relevantes políticos del PP, tratando de minimizar el efecto del copago de los medicamentos. Les voy a decir a ustedes que esa reforma me parece necesaria para atajar los abusos que se producen en la sanidad, pero no puedo estar de acuerdo con la frivolidad de los comentarios de esos «servidores públicos» a los que habría que recordar los privilegios de que goza la casta política a la que pertenecen. ¿Qué recibe gratuitamente un diputado al ser elegido? Nada menos que un Iphone 4S, un Ipad, un PC, modem 3G con voz y datos , ADSL en casa pagado y, si es del PP o del PSOE, un asistente para cada dos diputados (si es de otro partido, uno propio) y un despacho completamente alhajado. ¿Y... en cuanto a la retribución?: sueldo base de 3.126 euros mensuales y dos pagas extras. Si además forma parte de alguna comisión, recibe entre 775 y 1.590 euros más al mes. Si tiene algún cargo (portavoz, secretario... etcétera) otros 2.319 más mensuales. Hay que añadir que se le permite tener trabajos y cargos fuera del Congreso sin límite, así como los sueldos que perciba de su partido. ¿Y... para moverse y trasladarse?: si usa su coche propio, recibe 25 euros cada 100 km y se le pagan los peajes, si no tiene un coche oficial asignado (por cierto hay 45.000 en toda España) percibe 3.000 euros anuales para taxis además de billetes gratis de primera clase en avión y tren. ¿Y... tienen beneficios fiscales?: las dietas relacionadas con transporte y alojamiento no tributan, los sueldos por tener un cargo en el Congreso tampoco, mientras tanto los ciudadanos somos desangrados a impuestos. Si dejara de ser diputado, seguiría percibiendo una paga mensual de 2.814 euros hasta un máximo de dos años aunque tenga ya un sueldo privado. ¿Y... la jubilación?: si ha cumplido los 55 años y ha sido parlamentario durante 11, le dan el 100% de la pensión máxima (2.466 euros). Si ha sido diputado entre nueve y once años, percibe el 90%. Si lo ha sido entre siete y nueve años le queda el 80%. ¿Y... qué ocurre si se disuelven las Cortes porque va a haber elecciones?: pues estos padres de la patria, tienen derecho a una indemnización consistente en el sueldo de los días transcurridos hasta que se formen las nuevas Cortes, independientemente de que vuelva a ser elegido o no. El Congreso le seguirá pagando las cuotas de la Seguridad Social, mantendrá su póliza de accidentes y seguirá gozando del ADSL, voz y datos durante ese tiempo. Como se puede ver son unas condiciones «duras y lamentables». Por eso no es extraño que los políticos sean los más adecuados a la hora de hablar de recortes y sacrificios, pronunciado frases como: «Todos tenemos que arrimar el hombro». «La salida de la crisis debe ser con el esfuerzo de todos». «Estamos pidiendo un sacrificio a todos los ciudadanos». «Los sacrificios de hoy son la puerta al bienestar de mañana». «Hacemos lo mejor por los españoles»... y no sigo para no cabrearles a ustedes más. ¿Por qué creen que el Gobierno está dudando y alargando la petición del ineludible rescate a Europa?, pues porque, por imperativo de la UE, nos exigirán a cambio la reforma de la estructura de las administraciones públicas con una reducción del 25% y eso le supone a la privilegiada estirpe política renunciar a sus regalías. Al parecer poco les importa que ese remoloneo nos esté obligando a pagar por la deuda unos intereses insoportables para España. Donde estos vividores de la cosa pública solamente ven cuatro cafés con los ocho euros que le costará al mes las medicinas, un pensionista ve: una barra de pan, una docena de huevos, un kilo de sal, un kilo de arroz, 1 kilo de azúcar, tres manzanas, cuatro yogures, un kilo de harina, un bote de tomate y un litro de leche. Les prometo que otro día continuaré contándoles las prebendas de los senadores y de los políticos regionales y locales.