Ganaderos de la comarca de ovino insisten en que la reapertura de muladares en diferentes pueblos de la comarca puede y debe ser una de las soluciones más viables para reducir en la medida de lo posible los ataques de lobos ibéricos a los rebaños de ovejas y vacas. Los propietarios de cabañas creen que "si la fauna tiene alimento puede atacar, pero menos". Asimismo, creen que controlar la población de lobos, si se hace legalmente, es necesaria, ya que "de lo contrario proteger las ovejas a campo abierto es imposible, ni llevando más perros que ovejas".