Cuando la Asamblea Local de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) deseaba en su folleto de inscripción que se pasara un buen rato "inundando las calles de solidaridad" no sabían que el verbo se iba a convertir en literal.
Alrededor de mil personas desafiaron a la lluvia para participar en la III Marcha en favor de la AECC celebrada en Benavente.
El mal tiempo no frenó a la gente a quedarse en casa, que con chubasqueros y paraguas decidieron agarrarse a la maroma para recorrer las principales calles de la ciudad a pie, o las localidades más cercanas, en bicicleta.
Gente de todas las edades colaboró bajo la lluvia, calentando motores para las fiestas del toro con el carretón que salió a la calle de la mano de la Asociación Benaventana del Toro Enmaromado (ABTE) y con la maroma a la que se agarrón tanto mayores como pequeños.
Globos de color blanco y verde dieron alegría a un recorrido lluvioso que mantuvo los tres kilómetros a pie a pesar del intenso aguacero que caía a las once de la mañana, hora de salida de la marcha.
Una veintena de personas se subieron a las bicis para visitar las localidades de Santa Cristina de la Polvorosa, Arcos y Santa Colomba de las Monjas. Benavente fue punto de salida y retorno, tras catorce kilómetros de pedaleo, una nueva modalidad incluida este año con la colaboración de un club ciclista local.
A mitad de camino, el cielo se apiadó de los solidarios y paró de llover. Una hora después de iniciar el recorrido volvía a brillar el sol, que estuvo presente en la exhibición de zumba realizada en la Plaza Mayor, donde las chicas del Centro de Actividades Karol dirigieron las coreografías.
Distintos concejales de la actual corporación acudieron para apoyar la causa, que cada año tiene una mejor acogida entre la gente. La oportunidad de agarrarse a la maroma sin peligro supone una oportunidad única, especialmente para los más pequeños, y ayer los participantes demostraron que al mal tiempo hay que ponerle buena cara y que no hay climatología que les frene.
No faltó en el discurso final los agradecimientos a las empresas colaboradoras con la III Maroma Solidaria, la ayuda de las voluntarias que han gestionado las inscripciones, la colaboración de la Policía Local y Protección Civil para abrir y cerrar el recorrido, respectivamente y, por supuesto, el recuerdo de que las puertas de la Asociación Contra el Cáncer en Benavente están abiertas para las familias que lo necesiten con servicios financiados por actividades como la marcha de ayer.
