El secretario general para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia Manuel Olmedo Palacios realizó este lunes una visita de trabajo a los juzgados de la capital con el fin de iniciar los primeros contactos para poner en marcha el nuevo Tribunal de Instancia. Se trata de un nuevo modelo de organización que afecta a todos los órganos judiciales de la capital salvo la Audiencia y que supondrá un cambio radical en la organización judicial.
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Olmedo, que rehusó realizar declaraciones a los medios de comunicación, mantuvo reuniones con todos los estamentos judiciales con el fin de pedirles colaboración para la implantación de una reforma que está pendiente aún de aprobación, pero que se da por seguro que se aplicará como una forma de modernización de la Justicia. Básicamente se trata de que los juzgados dejen de ser unidades sin conexión entre sí para pasar a trabajar de forma coordinada.
Los juzgados de la provincia arrastran 8.499 asuntos en trámite de 2021
La implantación de los Tribunales de Instancia supondrá la supresión del juzgado como órgano unipersonal y la creación de un órgano colegiado en el que se integrarán todos los jueces de primera instancia de Zamora, introduciendo una mayor flexibilidad y favoreciendo una mayor calidad en las resoluciones en la primera instancia como consecuencia de la especialización.
La implementación de los Tribunales de Instancia deberá conllevar la redistribución de los jueces en el ámbito territorial de sus competencias de tal forma que ya no se produzcan los actuales desajustes que existen en la carga de trabajo entre unos juzgados y otros; asimismo, se acabará con las desigualdades en el tiempo de resolución de asuntos de un mismo tipo, permitiendo además una mayor especialización de los jueces y una mejora de las condiciones de trabajo. Esto redundará en una mejor calidad en el servicio público, favorecerá las sustituciones entre los mismos jueces, evitando el nombramiento de refuerzos y permitiendo acabar, progresivamente, con la “justicia interina”.
Desde la óptica estrictamente jurisdiccional, los Tribunales de Instancia permitirán la unificación de criterios en la interpretación y aplicación del derecho. Esto, contribuirá igualmente a reactivar la economía dado que, la seguridad jurídica y la previsibilidad de la respuesta judicial en caso de conflicto, son pilares de la confianza necesaria en toda inversión productiva, según el Ministerio de Justicia.
El proceso de modernización se llevará a cabo en toda España
Los 3.600 Juzgados de Primera Instancia pasarán a 341 Tribunales de Instancia en toda España. “Esos grandes órganos colegiados estarán sustentados por una Oficina Judicial, lo que permitirá que no haya justicia de distintas velocidades en el mismo territorio”, precisó la ministra, Pilar Llop, cuando se aprobó la norma en el Consejo de Ministros.
Por otra parte, se completará el proceso de implantación de la Oficina Judicial, que será una ventanilla de acceso único a la justicia para la ciudadanía. Los más de 7.000 juzgados de paz existentes evolucionarán hacia Oficinas Judiciales Municipales, que estarán dotadas de los recursos tecnológicos necesarios para que cualquier ciudadano pueda realizar los trámites que necesite sin desplazamientos y se podrán celebrar juicios telemáticos, diligencias judiciales o videoconferencias.