España y Portugal siguen estrechando su relación con el fin de ofrecer alternativas de futuro a los territorios fronterizos. En el marco de esos avances, y con la llegada de los fondos europeos en el horizonte, los responsables de reto demográfico de ambos países, Francesc Boya e Isabel Ferreira, se reunieron este martes para perfilar una “estrategia común” en la que también tendrán espacio figuras como la Universidad de Salamanca.
De hecho, la propia institución educativa ejerció este martes como sede de las Jornadas Bilaterales de Cooperación Transfronteriza que sirvieron como marco de un nuevo acercamiento entre ambos países. El rector de la USAL, Ricardo Rivero, reivindicó el papel de los “grupos de investigación potentes” que ofrece la propia Universidad para impulsar el beneficio transfronterizo y se mostró dispuesto a “tender puentes”.
Por su parte, Isabel Ferreira habló desde su posición como secretaria de Estado para la Valorización del Interior de Portugal, un área correspondiente al Ministerio de Cohesión Territorial luso. La representante portuguesa reconoció que la Universidad de Salamanca es “una referencia internacional, ligada a la ciencia, al conocimiento y la innovación”, algo que, bajo su punto de vista, consolida a la institución educativa, que tiene una de sus sedes en Zamora, como un centro “fundamental” para desarrollar “estrategias de revalorización de la frontera”, especialmente “en base a la ciencia”.
No en vano, según destacó Ferreira, los participantes en las jornadas pusieron sobre la mesa temas relacionados con los sectores de actividad socioeconómica “más relevantes” para otorgar “competitividad” a los territorios. “Portugal y España tienen una estrategia común en torno al movimiento transfronterizo, que es única y pionera en el espacio europeo. En esta línea, tenemos el compromiso conjunto de dotar de valor a la frontera, una de las más extensas de Europa”, resumió la responsable portuguesa, en declaraciones recogidas por la agencia Ical.
Para ello, las distintas partes cuentan con la capacidad de instituciones como la Universidad de Salamanca a la hora de “desarrollar todos los proyectos y transferir los resultados a la sociedad, aparte de fomentar la relación con las empresas, porque solo así se consigue crear empleo para atraer personas a la frontera”, apuntó Ferreira.
Por otro lado, la secretaria de Estado para la Valorización del Interior de Portugal reconoció que los fondos europeos son “importantes” para el objetivo de la cohesión territorial. “Estos fondos se unirán a los de financiación plurianual de cada país y también a los del programa Interreg, pero mucho más importante que el dinero que llegue es precisamente trazar estrategias que permitan gastarlo de forma consolidada y capacitando a los territorios”, concluyó.
Por su parte, Francesc Boya, secretario general para el Reto Demográfico, ahondó en que existe una estrategia transfronteriza entre los dos países que “se ha consolidado” y que “tiene una dinámica de trabajo muy intensa”. Según Boya, el hecho de haber estado este martes en las dependencias de la USAL supone “un hito importante” porque “las universidades deben integrarse en esta estrategia”.
“Estamos en un momento muy importante por la llegada de los fondos y la inversión que vamos a destinar a estos territorios”, prosiguió el secretario general, que recordó las 130 medidas redactadas por el Gobierno para tratar de hacer frente a los problemas de despoblación. “Además, estamos consolidando estrategias y programas de actuación conjunta. Es la mejor manera de utilizar esos recursos, generando una red estable de cooperación permanente y que nos ayude a desarrollar toda esta zona de la frontera”, finalizó.
La nueva cumbre entre ambos países se celebrará el 28 de octubre
Un año después de la cumbre celebrada en 2020 en Guarda, España y Portugal se preparan para un nuevo encuentro al más alto nivel en el marco de la cooperación transfronteriza. La cita tendrá lugar esta vez en la localidad extremeña de Trujillo. Allí se reunirán los máximos mandatarios de ambos gobiernos, Pedro Sánchez y Antonio Costa, junto a varios de sus ministros y secretarios de Estado implicados en el marco de la relación bilateral.
Del lado español, la delegación sufrirá bastantes cambios en relación a la que acudió a la cumbre del año pasado. La remodelación del Gobierno que realizó Sánchez en julio, unida a cuestiones como la salida de Pablo Iglesias del Ejecutivo, provocarán bastantes modificaciones en los interlocutores nacionales. También en lo que más afecta a Zamora, Francesc Boya se estrenará en un encuentro de estas características como secretario general de Reto Demográfico. En octubre de 2020, Elena Cebrián todavía ocupaba el cargo.
En cuanto a los temas que se tocarán durante la cita bilateral, la previsión es que las conexiones ferroviarias y la gestión de los fondos europeos tengan un papel preponderante en la discusión. Los intereses de Extremadura, como región anfitriona de la cumbre, se abordarán de forma especial. Aun así, en el repaso al cumplimiento de los compromisos sellados en la estrategia de ambos países, España y Portugal deberán evaluar los pasos adelante realizados en lo referente a Zamora. Ahí entran las conexiones por carretera, el impulso a determinados servicios educativos y sanitarios conjuntos o la batalla contra la despoblación como concepto general. Antes, los Presupuestos Generales del Estado ofrecerán pistas sobre el grado de implicación del Gobierno en algunos de esos compromisos.
