Pasado lo más duro de la pandemia, cierre de la actividad no esencial incluido, la construcción se ha mantenido como uno de los pocos sectores capaces de generar empleo en la provincia de Zamora y en el resto de España. Pero la construcción quiere más. Y se apoya para ellos en los fondos europeos que llegarán a España procedentes de Europa, fondos que, indican desde el sector, deben ir destinados en parte a favorecer la rehabilitación de viviendas, “un nicho de generación de riqueza, de economía y de empleo”. Así lo estima Emiliano Alonso, presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios de Construcción y Obras Públicas (Azecop).

Las cuentas de los constructores son claras. Castilla y León recibirá 240 millones de euros de este plan, una inversión que, “si se aprovecha”, podría llegar a generar un problema de déficit de mano de obra. “Castilla y León va a necesitar 24.000 trabajadores de la construcción en los próximos años”, lo que llevaría al sector de nuevo a los niveles previos al pinchazo de la burbuja pero, esta vez, con un empleo “más sostenible” en el tiempo.

Construcción de un bloque de viviendas en Pablo Morillo. | Emilio Fraile

Con estos mimbres el sector se reivindica a sí mismo como el “principal generador de empleo” de la futura época postCOVID y mira a las instituciones, “a las que corresponde elaborar planes de inversión fiables y serios” para captar los fondos europeos. “Tenemos que evitar que estos trabajadores, que van a ser necesarios, acaben marchándose a Madrid”, apostilla Emiliano Alonso, que pide a las administraciones “pedagogía. Igual que tenemos asumido que la ITV del vehículo es obligatoria, también deberíamos tener asumido que lo es la inspección del edificio. Además, hace falta un mejor marketing. Reformar una vivienda no es caro si se tiene en cuenta que se trata de una inversión, que aumenta el valor del inmueble y que reduce de una forma muy significativa el gasto energético”, aseguran desde la patronal del gremio. El coste medio de reformar una vivienda se mueve en el entorno de los 15.000 euros y genera, de media, dos puestos de trabajo mientras dura la obra. “Hemos sido un sector que ha combatido bien la crisis, que ha generado empleo y tenemos un futuro optimista, con capacidad para generar más puestos de trabajo en una provincia que los necesita”, concluye Alonso.

Asociación Zamorana de Empresarios de Construcción y Obras Públicas, el sector necesitaría un 40% más de empleados. Estos datos, llevados a Castilla y León, supondrían pasar de 60.000 trabajadores que hay actualmente a más de 80.000. En Zamora, la proyección indica que se avanzaría desde los 6.000 actuales a más de ocho mil.

El sector prevé un aumento de la contratación de hasta el 40% en la provincia

Al término del año 2019, el último antes de la entrada en escena del coronavirus, el sector de la construcción ocupaba en Zamora a 5.800 personas. A finales de 2020, en pleno impacto del COVID en la economía de la provincia, la cifra de ocupados no solo no se redujo, sino que aumentó hasta los 6.300 trabajadores. Dato que, según la patronal del ramo, podría llegar a quedarse corto. Emiliano Alonso aboga por “hacer atractivo para los jóvenes” un sector que ya no es “aquel de pala, pico y carretilla que muchos tienen en la cabeza”, que “se ha modernizado” y que está “metido de nuevo en las nuevas tecnologías y en las nuevas formas de trabajar”. Según los cálculos de la

Los empresarios estiman que, si la inversión europea que se prevé se llega a concretar, la falta de mano de obra cualificada puede llegar a suponer un problema para un sector que, por lo demás, ha ganado en seguridad. “Durante el año pasado, cuando el trabajo solo se paró durante los quince días en los que se detuvo toda actividad no esencial, los accidentes laborales en el sector de la construcción descendieron un veinte por ciento como muestra de la apuesta por mantener entornos de trabajo seguros”.