La recuperación del tren madrugador que unía Zamora con Madrid hasta el pasado mes de marzo se antoja imposible a corto plazo. Así se desprende de la información facilitada por Renfe a este medio. De momento, el operador ferroviario no tiene “previsión ni fecha” para volver a poner en marcha este servicio que permitía a los ciudadanos de la provincia llegar a la capital de España antes de las nueve de la mañana.
Desde Renfe se amparan en la evolución de la pandemia y en el descenso del número de viajeros que ha traído consigo el COVID para justificar este escenario. Además, fuentes del operador ferroviario subrayan que este no ha sido el único servicio suspendido a causa de la coyuntura sanitaria, aunque quizá sí esté entre los más sensibles. Lo cierto es que el nexo con Madrid a esa hora concreta del día convertía al tren madrugador en una de las conexiones más importantes para la provincia.
Así las cosas, todo apunta a que, mientras la pandemia no afloje, no habrá tren madrugador. Eso, si vuelve. Hay que recordar que, durante los meses de verano, cuando la crisis sanitaria dio un respiro y aumentó la movilidad, Renfe tampoco recuperó este servicio. Ahora, los responsables del operador ferroviario se remiten a “la evolución de la demanda”, y reconocen que esta tercera ola “no parece el mejor momento” para poner sobre la mesa la cuestión.
De este modo, desde Renfe consideran la conexión matutina cancelada “sine die”, y evitan confirmar su regreso una vez la situación regrese a la normalidad posterior al COVID. Por lo pronto, ya son diez los meses que dura la ausencia del servicio, una circunstancia que ha generado numerosas protestas desde diferentes sectores y ámbitos institucionales.
Vista la situación, parece que las protestas no están surtiendo efecto, y que Renfe se mantendrá firme en la idea de mantener el servicio en suspenso. La siguiente parte de la discusión llegará cuando la cuestión sanitaria deje de servir como obstáculo para el regreso del tren.
EL PRIMER VIAJE DEL DÍA HACIA CHAMARTÍN LLEGA A SU DESTINO A LAS 11.04 HORAS
Con la eliminación del tren madrugador, un zamorano que quiera viajar en tren a Madrid en un día de diario puede llegar a la estación de Chamartín de la capital, como muy pronto, a las 11.04 de la mañana, tras incorporarse a un viaje que parte de la ciudad a las 9.48 horas. El “retraso” con respecto al madrugador es de más de dos horas, e implica que las personas que deban hacer algún tipo de gestión o actividad laboral en la capital del país a primera hora deban buscar una alternativa mucho más compleja o ir a dormir la noche anterior para evitar trayectos nocturnos.
La ausencia desde marzo de un servicio que conecte con Madrid a primera hora es la causa del revuelo que está generando la supresión de este tren, un enfado que ha llevado a algunos líderes institucionales, como el presidente de la Diputación, Francisco José Requejo, a remitir varias cartas a Renfe para pedir explicaciones y para reclamar que el operador ferroviario reconsidere su postura.
En uno de esos intercambios epistolares, los responsables de Renfe instaron a Requejo a abonar desde su institución el déficit que causaría la puesta en marcha de este servicio, una proposición que el presidente provincial encajó como una tomadura de pelo. De hecho, la Diputación ni siquiera ha valorado esa posibilidad, dadas sus capacidades económicas y el agravio que supondría.
