El estudio de los sanitarios de Zamora ha puesto el foco en el problema del sobretratamiento en los mayores y en la modificación de los hábitos prescriptores. "También ha propiciado la revisión individualizada del estado de salud de los pacientes diabéticos, incluso de aquellos que no fueron comunicados, y de la relación beneficio/riesgo de la terapia intensiva en cada uno de ellos", se añade.

Aun así, los investigadores reconocen que los resultados obtenidos "evidencian que aún es necesario introducir y normalizar la deprescripción en la práctica clínica, especialmente en pacientes con esperanza de vida limitada y en los que el tratamiento intensivo ofrece escasos beneficios clínicos a costa de incrementar notablemente el riesgo de efectos adversos", subrayan.

Por ello, desde el trabajo se sugiere la necesidad de realizar un programa formativo, en toda el área de salud y consensuado con Atención Especializada, sobre el control y abordaje terapéutico de la diabetes tipo 2 en mayores.

Este trabajo saca a la luz que existe una elevada proporción de pacientes mayores con este tipo de diabetes que tienen además importantes comorbilidades -es decir, dos o más trastornos o enfermedades- por lo que el daño por lo que el daño por el control intensivo de la glucemia y el riesgo de hipoglucemia severa podría exceder los posibles beneficios.