La madre víctima de violencia de género y sus dos hijos amenazados de desahucio, menores de edad (de once y dos años respectivamente), podrán mantenerse en sus casa. La medida, que se acaba de tomar por parte del juzgado, da un nuevo plazo a la familia, que seguirá esperando la posibilidad de acceder a un alquiler social. El desalojo estaba previsto para las 9.45 de mañlana. Las tres personas afectadas iban a quedarse, así las cosas, sin una alternativa habitacional, algo que ahora se ha corregido.

Con todo, los plazos corren y la situación no está solucionada. La familia y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, que ha servido de apoyo en este caso, apremian a la Junta y al Ayuntamiento para que adjudiquen una vivienda de alquiler social a los afectados, que viven con unos ingresos de 430 euros mensuales y sin trabajo. La Junta, por boca de la delegada Clara San Damián, se mostró el lunes dispuesta a conceder una vivienda social "siempre que el Ayuntamiento emita el informe de los Servicios Sociales", necesario para la tramitación. Si todo va bien, el nuevo plazo dado debería ser suficiente para canalizar la situación.