En un espacio de encuentros y de conversación sin prisa, muchas veces relacionada con algún libro, se tornó ayer la librería de San José Obrero que decidió promover una quedada, pese a a ser jornada festiva, para celebrar el Día del Libro con los libros.

"Vivimos por el barrio, supimos de la iniciativa y quisimos venir a festejar el Día del Libro", afirmó una lectora que acudió con toda la familia, mientras que los responsables de la tienda instaban a las personas que accedían al establecimiento a probar "una tapita hecha en casa", decían.

"Esta librería siempre es un lugar de encuentro entre la gente del barrio y hoy lo es de una manera mucho más especial", aseveró una habitual del comercio que ponía en valor la actividad promovida por la librera María Peña. Y mientras unos hojeaban volúmenes, otros se hacían fotografías con sus títulos favoritos en el escaparate adornado con instantáneas de gentes con otros libros. "Es una manera muy original de animar a acercarse a la lectura", comentaba un joven en el exterior del negocio.

Por otro lado, muchos de los libreros de Zamora saldrán hoy y mañana a la calle para festejar el Día del Libro. Unos se situarán en las inmediaciones de sus establecimientos y otros optarán por ubicar sus puestos en la céntrica Santa Clara.