Las calles del casco histórico acogen desde ayer el mercado medieval, que reúne decenas de puestos a lo largo de la principal vía peatonal de la zona. El mercado celebra este año su séptima edición y, aunque está abierto desde ayer por la tarde, se inaugurará oficialmente hoy a las once de la mañana. Los puestos están instalados desde la Plaza Mayor hasta la plaza de San Ildefonso. El recorrido es más corto que en otras ocasiones -cuando los puestos llegaban casi hasta la plaza de la Catedral- pero eso no se traduce en que haya menos vendedores. La presencia de ambulantes es la misma que en otras ocasiones, ya que se ha incrementado su presencia en la plaza de Viriato y en la de Claudio Moyano.
