Dos de los tres guardias civiles imputados por el delito de no perseguir los delitos perderán su empleo si la condena a seis meses de inhabilitación para empleo o cargo público que acaba de dictar la magistrada del Juzgado de lo Penal se confirma en la Audiencia Provincial, instancia a la que podrán recurrir la sentencia. Por contra, la juez absuelve a uno de sus compañeros, de iniciales J.A.G.T., al considerar que existen dudas de que pescara ilegalmente, como se comenta en una de las conversaciones telefónicas intervenidas por la Guardia Civil en las que participaban los ganaderos con terceras personas y con dos de los otros dos guardias imputados. La juez detalla que el guardia absuelto no estaba adscrito al Seprona, como A.G.V. y M.M.L., a los que acusa de "no perseguir" hechos como "la existencia de animales muertos, restos de crotales y cabezas de ciervos y corzos"; así como "los relativos a caza que realizaban los acusados" y que "revisten caracteres de delito". El fallo indica que "los agentes por su profesión conocían o debían conocer" que los ganaderos "excedían ampliamente una mera infracción administrativa. Para ello alude a la cantidad de ejemplares que abatían, la duración en el tiempo de su conducta y las circunstancias en que los mataban, careciendo de licencia para ello, sin respetar los periodos de caza y número de ejemplares".