En la Junta pro Semana Santa son conscientes de que tan importante es la ampliación de la actual colección, como el coste económico que tendrán las obras en el futuro y los gastos que generará el mantenimiento. En este sentido, confían en un proyecto que no sea gravoso para las arcas del órgano de hermandades, que acaban de superar una situación más que complicada ante la reducción de las subvenciones de parte de las administraciones.

En cuanto a la gestión, los nuevos estatutos contemplan la creación de la figura de un "responsable" del Museo, que habría de salir de alguna de las 16 cofradías que forman la Semana Santa. El texto, que aún está en periodo de revisión por parte del Obispado, prevé la creación de distintas áreas de trabajo, que tienen por meta la implicación de todas las cofradías, así como el trabajo específico en ciertos ámbitos como la promoción, las relaciones con instituciones y personas o el propio Museo de Semana Santa.

Hasta la fecha, la Junta de Cofradías se ha encargado de la gestión de manera directa y completa, algo que supone también un peso importante en la actividad anual del órgano. En todo caso, también se ha destacado los ingresos que genera el Museo, que ayudan a compensar los gastos.