La campaña por la dignificación de los empleados públicos, licitada por la Consejería de Hacienda por valor de 250.000 euros, no verá finalmente la luz al haber retirado la Junta de Castilla y León los fondos que se iban a destinar a tal publicidad. La decisión de la Consejería de Hacienda llega después de que varios sindicatos alzaran la voz contra el "despilfarro" de dinero público, mientras existen problemas donde la inversión "es más necesaria, como por ejemplo las ayudas a la adquisición de libros de texto".