Las auxiliares de enfermería han quedado excluidas de las charlas formativas ofrecidas por Sacyl a los trabajadores sanitarios de Zamora para explicarles el protocolo a seguir frente a los posibles casos sospechosos de ébola. Francisca González, secretaria provincial del Sindicato de Auxiliares de Enfermería, SAE, dejó ayer patente "la indignación" del colectivo por el hecho de que los responsables sanitarios no les han tenido en cuenta a la hora de abordar el operativo de prevención contra le enfermedad, en el que se ha incluido solamente a médicos y enfermeras, pero no al resto de personal sanitario, como son los auxiliares, y tampoco a otros trabajadores, como los celadores, que también pueden entrar en contacto con el enfermo.

Especialmente sangrante es el caso de las auxiliares de enfermería, cuya labor se centra directamente en el cuidado del paciente, en tareas como limpiarlo, atenderlo o hacer la cama, en contacto directo con las principales fuentes de contaminación por ébola como son los fluidos, como sudor, saliva o heces. Hay que tener en cuenta que algunos de los síntomas típicos de la enfermedad son los vómitos y las diarreas. González asegura que los miembros del colectivo están sumamente extrañados por el hecho de no haber recibido ningún tipo de información, teniendo en cuenta que ha sido precisamente una auxiliar de enfermería la única infectada confirmada en España.

González explica que en la reunión convocada por el departamento de Salud Laboral en Urgencias se llamó solamente a médicos y enfermeras y no a auxiliares de enfermería, que también están en contacto con el paciente. Los auxiliares tampoco recibieron el correo electrónico sobre el protocolo establecido por Sacyl que sí se proporcionó a las otras categorías sanitarias. Las conversaciones con la jefa de enfermería, explica la responsable de SAE, e incluso el intento de diálogo con el gerente del Complejo Asistencial, ayer, han sido infructuosos, ya que Francisco Javier Montes ni siquiera recibió a la representante sindical.

Así las cosas, las auxiliares reclaman a Sacyl la información y formación suficiente para poder enfrentarse a un posible caso sospechoso, ya que a estas alturas, no ven que se haya puesto en marcha ningún tipo de operativo serio.

Las auxiliares de Zamora se mostraron asimismo totalmente en contra de las declaraciones realizadas por el consejero de Sanidad de Madrid, en las que acusaba a la paciente de ébola de mentir y la responsabilizaba del contagio sufrido.

La preocupación por el suceso queda patente en las múltiples llamadas que la sede del SAE ha recibido por parte de las integrantes de los dos autobuses fletados por el sindicato desde Zamora para trasladar a las opositoras que se presentaron a las pruebas convocadas en Madrid el pasado 27 de septiembre, a las que también acudió, Teresa Romero. Uno de los autobuses fue para la sede de Moncloa, mientras el otro se dirigía a Somosaguas, precisamente donde se examinó la enferma de ébola. Según las comprobaciones realizadas por el sindicato, ninguna de las zamoranas coincidió examinándose con la auxiliar de Madrid infectada, que realizó la prueba en el aula 315.

Un plan en cada provincia

Por su parte, el Sindicato de Enfermería, Satse, exigió ayer que "todas las gerencias del sistema de salud de la Comunidad pongan en marcha la formación suficiente para los profesionales que trabajan en todos los centros sanitarios, y que se les dote de los suficientes equipos de protección individual que garanticen en todo momento la máxima seguridad, para trabajadores y pacientes ante un caso de contagio por ébola".

Aunque la Consejería de Sanidad comunicó el pasado 29 de agosto a los representantes de los trabajadores de Sacyl el protocolo activado y las medidas y el procedimiento de seguridad que se ponía en marcha, "el Sindicato de Enfermería ha constatado que hay gerencias sanitarias de la Comunidad que están escatimando las medidas de protección establecidas en el protocolo y que hay hospitales que no siendo los de referencia para una crisis por el ébola, no cuentan con suficientes equipos de protección ni se ha formado a sus trabajadores".

Además, los trabajadores de algunos centros de salud y de hospitales "siguen sin tener la suficiente información y formación de cómo actuar ante un posible caso que se les presente, y en algunos casos, se les ha comunicado que la información la pueden sacar de Internet o de la Intranet del Servicio de Salud. Denuncia también la tardanza y escasez en la distribución de los equipos de protección por parte de Sacyl.