Los trabajos de la autovía Zamora-Benavente alcanzan el ecuador de su ejecución cuando se cumple el primer año de la obra. El Ministerio de Fomento prevé la inauguración de dos tramos en el próximo 2015 con el objetivo de poner en servicio más de 60 kilómetros, según la información recabada por la Agencia ICAL. En verano del próximo año está previsto abrir al tráfico los 49 kilómetros de Benavente a Zamora de la A-66, que comenzó a construirse a principios de agosto del año pasado.

El valor total de la operación asciende a 998 millones de euros, IVA incluido, ya que incluyen la construcción de la vía y su posterior conservación así como la futura explotación durante un periodo de una treintena de años que finaliza en 2042.

En las obras trabajan alrededor de medio millar de personas a destajo para acabar a tiempo el proyecto e inaugurar conforme a las previsiones. En cuanto a los recursos materiales, se ponen en marcha 252 camiones y 36 excavadoras. En la actualidad, están terminando algunos terraplenes, excavaciones, explanadas y estructuras. La jornada laboral de los operarios es de 16 horas con el objetivo de que en un año pueda ser utilizada por 8.000 vehículos diarios.

En 2015, año de elecciones, las obras de la A-11 que conecta con Portugal se presentan de nuevo sin mucho movimiento a excepción de los 13,7 kilómetros de la variante de Aranda de Duero, en Burgos, el único tramo de la Autovía del Duero que está en construcción y donde darán un empujón. No obstante, el Ministerio también tiene previsto abrir al tráfico los 49 kilómetros del tramo Benavente-Zamora de la ruta de la Plata que permitirán cerrar el eje Gijón y Sevilla.

El Ministerio de Fomento marca nuevos deberes en autovías, una vez que las obras de unos 75 kilómetros se encuentran muy avanzadas en toda la región y con fecha para su puesta en servicio.