Tras casi un año de negociaciones, la Sociedad Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio (Segipsa) y el Ayuntamiento de la capital han firmado ya el contrato de arrendamiento para la cesión del Banco de España como futura sede de la Policía Municipal y archivo. El acuerdo tiene una vigencia de diez años, prorrogable durante una década más, y supondrá una renta anual de 90.000 euros. El coste de las obra de adaptación que tendrán que cofinanciar Segipsa y Ayuntamiento ronda los 700.000 euros, de los que 346.000 serán asumidos por la sociedad estatal para la puesta a punto de las instalaciones. El resto será asumido por la institución municipal en lo referente a la adaptación de la infraestructura a su nuevo uso como sede de los agentes locales.

La renta, que se abonará en doce pagos mensuales, empezará a costearse desde el 1 de enero del próximo 2015, con independencia de que las obras estén o no a punto. Los trabajos serán adjudicados de forma conjunta por un concurso tramitado por el Ayuntamiento y con un plazo de ejecución de siete meses que el equipo de Gobierno aspira a que se cumplan para que la Policía Municipal pueda estar funcionando en enero de 2015 en el nuevo emplazamiento.

La infraestructura consta de un edificio principal y de control de entrada, con área de seguridad y circulación alrededor del conjunto, cerca de cerramiento y zona ajardinada, con una entrada y salida únicas. El edificio se compone de cuatro plantas y la superficie total construida es de 3.429 metros cuadrados sobre un solar de más de 5.000.

La edificación es un proyecto de Ramón Cañas Represa de los años 1984 y 1985. Se trata de una construcción compacta originada sobre una planta sencilla a partir de la mezcla de distintos volúmenes. El Banco de España fue transmitido a Segipsa en 2004, después de que dos años antes suscribiera con el Ministerio de Hacienda un protocolo sobre actuaciones concernientes en materia inmobiliaria.