La Diputación destinará, al menos, cinco millones de euros al plan extraordinario de obras

El plan extraordinario de obras que se nutre del remanente de 23 millones de la Diputación tendrá, al menos, la misma dotación que la partida ordinaria que se destina en los últimos ejercicios a la ejecución de proyectos en los pueblos. El dinero del sobrante servirá, de esta manera, para llevar a cabo la remodelación de varias carreteras y habilitará, como mínimo, unos cinco millones de euros. Ese fue el compromiso que ayer expresó el presidente de la institución provincial, Fernando Martínez Maíllo, quien llamó a «consensuar» el destino de las principales inversiones con los grupos de la oposición.

A tal fin, Martínez Maíllo anunció un próximo encuentro para debatir qué inversiones son prioritarias. La decisión se llevará al pleno del próximo mes de abril bajo el criterio de que «el total del remanente se va a invertir, que nadie tenga dudas», apuntó el presidente de la institución provincial.

Pese a la oferta de diálogo, los diferentes partidos políticos reiteraron que el volumen económico del remanente es fruto de la «mala gestión» de la Diputación Provincial y criticaron a Maíllo por «quedarse corto» en el plan ordinario, que será de carácter bianual y tendrá una dotación de nueve millones de euros hasta 2015, diez millones si se añade la cuantía reservada para Morales el Vino, Toro y Benavente.

En este sentido, la oposición mostró su desacuerdo en el plazo de dos años para este primer plan. Así, la portavoz socialista Rosa Muñoz criticó que la fórmula tiene como objetivo «hacer las obras antes de las elecciones», aunque «no van a poder cobrar el importe total de la obra hasta 2015». Asimismo, los socialistas pidieron que las bases incluyeran la posibilidad de adelantar el dinero a los ayuntamientos, algo «imposible» por su «complejidad técnica», zanjó el diputado popular de Obras Manuel Vega.

De cualquier modo, el programa de inversiones en los pueblos quedó listo para entrar en vigor. «Un municipio puede ejecutar ya un proyecto si quiere», avanzó el presidente Martínez Maíllo. Los criterios de reparto establecen 18.000 euros por municipio y una cantidad adicional por anejo, donde se pueden incluir conceptos como el proyecto o la dirección de obra. Este aspecto encendió el debate en torno a la utilidad del célebre Plan E, las inversiones que el expresidente Rodríguez Zapatero puso en práctica para mitigar la crisis económica. La socialista Rosa Muñoz dio la «bienvenida» a los criterios adoptados por la Diputación frente a los populares, bajo la crítica unánime de que aquella iniciativa «no es ejemplo de nada».

Asimismo y tras el consejo de alcaldes, la Diputación rectifica el sistema de asignación de fondos, donde tendrán prioridad los municipios pequeños, esto es, la mayoría de los ayuntamientos de la provincia. En principio, la asignación de fondos estaba pensada en orden inverso: que las inversiones de los municipios de mayor tamaño arrancaran primero.

El pleno de la Diputación aprobó ayer la firma de un protocolo con la Junta de Castilla Y león para «coordinar todos los servicios destinados a crear y consolidar empresas», explicó el vicepresidente José María Barrios. Es decir, un «catálogo de recursos» común para que la institución esté integrada «en el foro de creación de empresas», añadió. Todos los grupos votaron a favor, aunque la portavoz socialista Rosa Muñoz dijo no detectar «ninguna medida concreta» de apoyo a la creación de empresas «más allá de la literatura».

Por otro lado, la institución comenzará su labor de asesoramiento y apoyo en la formulación de expedientes de declaración de ruina. La iniciativa supone «un paso adelante», en palabras del Partido Socialista. Para los populares, «un ejemplo» de lo que, poco a poco, irá suponiendo la nueva ley de administraciones locales.