Solo una causa solidaria ha sido capaz de descolgar las fotografías que desde hace casi dos décadas cuelgan de las paredes de la cafetería «Aureto», en la plaza de Viriato, para cambiarlas por otras imágenes totalmente distintas. Se trata de una iniciativa puesta en marcha por seis fotógrafos zamoranos con el objetivo de recaudar fondos para las ONG Entrepueblos de España y Habitar en Nicaragua. Precisamente es en su capital, Managua, donde se destinarán los fondos que se recauden de la venta de estas fotografías, todas originales y a un precio de 20 euros, firmadas por sus autores y con enmarcado en negro.

Las instantáneas de Javier Izquierdo, Cristina Rodríguez, Lorenzo Ferrero, José Martín, Carlos Fernando García y José Antonio Pascual se podrán ver en la cafetería hasta el próximo 5 de enero. Desde el Puente de Piedra hasta las aceñas de Olivares, pasando por retratos de la Semana Santa o paisajes de la provincia, tanto en blanco o negro como en color, la temática es tan amplia que es fácil encontrar aquella fotografía que, por un módico precio y una buena causa, resuelva un regalo original de cara a Reyes, entre las sesenta alternativas que se presentan.

«Hay varias copias de cada una de las fotografías y en ninguna se pondrá el cartel de vendida hasta que no finalice la exposición, para facilitar que se pueda ver la exposición con mayor facilidad. Eso sí, si alguien viene de fuera, le preparamos una fotografía al momento y se la puede llevar», facilita uno de los fotógrafos participantes, José Antonio Pascual, quien añade que tienen «muchos más marcos esperando para ser puestos en las imágenes y vender las máximas fotografías posibles».

Además del tamaño en 20x25, también disponen de reproducciones en 30x45 de lo que será el calendario de los bomberos del consorcio de la Diputación, a un precio de 60 euros. Este almanaque se pondrá a la venta en unos días a un precio de 5 euros y lo recaudado también irá destinado a diversas obras en Managua. Precisamente el protagonista de uno de los meses, el bombero Luis Fernando Barbero, ha vivido de primera mano la situación que se vive en el barrio de Olof Palme, en la capital de Nicaragua, y por ello promovió esta original manera de conseguir fondos para objetivos como llevar agua potable a las viviendas o construir unas canchas polideportivas. «Con que consiguiéramos unos 3.000 euros con las ventas de los calendarios y las fotografías, se podrían conseguir muchas cosas», anima.