La recreación de la ciudad de Belén que guardan los muros de la iglesia de La Encarnación se convertirá en la muestra más visitada en la historia de su promotora, la agrupación belenista La Morana, que ha contabilizado ya 35.000 personas en el edificio provincial, cifra total en ediciones anteriores con una larga semana navideña todavía por delante. Entretanto, el tiempo benigno de la jornada de ayer dejaba vislumbrar nuevas colas en el acceso a la exposición, abierta hasta el próximo día de Reyes.

«La gente está valorando las dimensiones, los detalles, la escenografía y el planteamiento, que vuelve a ser original y supone una vuelta de tuerca más en nuestra forma de ver el belén», explica Francisco Iglesias, presidente del colectivo, que se muestra «muy contento» porque la cifra total de personas que disfrutarán de la propuesta «rondará las 40.000, algo que nunca hemos conseguido y hará que esta exposición sea la más visitada en Zamora durante todo el año».

Otro de los aspectos que más llaman la atención es que la procedencia de los visitantes no es exclusiva de la capital. «Hay muchos vecinos de la provincia que se han acercado para ver el montaje», apunta Iglesias Escudero, quien va más allá: «Tenemos noticia de que forasteros de La Coruña o Cáceres y, por supuesto, de Valladolid o Salamanca han acudido a La Encarnación». El interés por la tradición belenista está en auge y, en este sentido, La Morana ya cosechó un notable éxito la pasada Navidad con la extensa exposición que acogió el recinto cultural de Caja España-Duero en Salamanca, donde la agrupación recreó los escenarios de la Natividad que un año antes habían visto los zamoranos en La Encarnación.

Para los más interesados en la tradición, La Morana ha editado un disco DVD con el proceso de elaboración de «El hijo del carpintero», un vídeo en el que se muestran los detalles de la recreación de la ciudad gobernada por Herodes, donde se aprecia la precisión en los detalles de los edificios, la riqueza de las tareas cotidianas o el guiño a la tierra de Fermoselle, con la escena que recoge la labor de vareado de los olivos para extraer las aceitunas.

Con los resultados de afluencia de público sobre la mesa, La Morana cree que «hemos acertado con la propuesta de este año», aunque la agrupación también reconoce que otro pilar del éxito de visitas ha estado en las cálidas temperaturas que han acompañado la apertura de La Encarnación, sin frío y sin lluvias pese al inicio de la estación invernal.

Aunque «El hijo del carpintero» permanecerá abierta hasta el seis de enero, hoy es una jornada idónea para disfrutar del último día del año visitando en horario especial la muestra. Los socios de la agrupación abrirán las puertas de la iglesia provincial de doce a dos de la tarde y de cinco a nueve de la noche. No hay excusas para acercarse, como peregrinos, a la ciudad de Belén.