El interior del Castillo de Zamora albergó en la noche de ayer una nueva representación de las «Noches de Terror» y sorprendió a los intrépidos visitantes que se acercaron a realizar una visita un tanto diferente. Durante el paseo, los vastos muros del edificio no representaron protección alguna y diferentes espíritus se acercaron a la fiesta. La actividad está enmarcada dentro del programa «Noches y Días 2012».