El alcalde de Bermillo subraya la inquietud de los vecinos por los explosivos

La Guardia Civil interceptó sobre las 21:30 horas de ayer, en Bermillo, una furgoneta de matrícula francesa que contenía explosivos y cuyo conductor logró huir en el coche patrulla de los agentes, tras lo que fue detenido en Portugal, al igual que una mujer que iba en un coche lanzadera, ambos presuntos miembros de la banda terrorista ETA.

El alcalde de Bermillo de Sayago ha explicado a EFE que, al principio, "había bastante confusión porque no se sabía muy bien lo que había pasado, pero cada vez se juntaban más agentes de la Guardia Civil en el pueblo y los vecinos estaban inquietos".

Por motivos de seguridad, la Guardia Civil desalojó las seis viviendas más próximas al aparcamiento del Centro de Acción Social de la localidad, junto a la carretera CL-527 que atraviesa el municipio, donde se encontraba la furgoneta blanca con los explosivos.

Uno de los evacuados ha sido el propietario del Bar Capri, quien ha comentado cómo varios vecinos siguieron el transcurso de los acontecimientos en la calle, cerca de los coches patrulla de la Guardia Civil.

"Nos íbamos enterando de lo que ocurría gracias a su radio y así supimos que perseguían al conductor del coche patrulla robado y que lo detuvieron después en Portugal", ha explicado.

El comentario más común de la mañana en el Bar Capri ha sido el de la satisfacción porque no se hubiera registrado ningún daño al paso del vehículo por el pueblo.

"Menos mal que no ha pasado nada y todo el mundo está bien", ha dicho el propietario del establecimiento.

Bermillo es una de las principales localidades de la comarca de Sayago, con 1.360 habitantes, al suroeste de la provincia de Zamora, a 38 kilómetros de la capital y a 27 de la localidad fronteriza con Portugal de Fermoselle, situada en el Parque Natural de los Arribes del Duero.