La obra de pavimentación de la carretera de la avenida de Galicia continúa dando problemas a los conductores que se ven obligados a transitar por la zona. Los hundimientos del firme continúan produciéndose, con el consiguiente riesgo para el tráfico, ya que las tapaderas de las alcantarillas sobresalen cada vez más y «los conductores tienen que invadir la línea continua y el carril contrario». Las quejas de los ciudadanos se producen de forma constante ante el mal estado de la calzada, desde que concluyeran las obras hace más de dos años.