La Guardia Civil de Zamora localizó ayer, después del alba, sobre las 7.30 horas, en la carretera de Almaraz, a más de 12 kilómetros de la ciudad, al hombre enfermo de Alzheimer que desapareció el pasado lunes a media mañana en las inmediaciones de la plaza de la Constitución, según han confirmado fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

El varón, de 73 de edad, fue encontrado «deambulando, temblando y muy desorientado», concreta su esposa, Celia Hernández, que detalla que tras los agentes iba el hijo menor del matrimonio que reside en San Sebastián. Al parecer cuando la patrulla del Instituto Armado preguntó a Isaac que dónde se encontraba, éste les respondió que «estaba en San Sebastián y que quería coger el autobús para ir a casa con su mujer».

Tras comunicarles los agentes de la Benemérita la buena noticia, el reencuentro de la familia tuvo lugar en el centro de salud de Santa Elena donde los facultativos sometieron a Isaac a un reconocimiento. «Nos han dicho que está bien y que, posiblemente, haya comido algo durante estos días porque se encuentra perfectamente», concreta Hernández que detalla que su marido «está lleno de arañazos, quemado por el sol y ha perdido las gafas».

«No sabe lo que ha pasado, se lo hemos tenido que explicar», asegura la esposa que todavía tiene muy presente la angustia vivida. «Han sido unas jornadas horribles», menciona en reiteradas ocasiones a lo largo de la conversación, mientras que Isaac «duerme tranquilo». «Le hemos dado muchos líquidos y ha comido de manera normal, pero está fatigado», asevera Celia Hernández.

El hombre apareció en la zona en donde lo situaban las pistas facilitadas por los ciudadanos anteayer y donde la Guardia Civil intensificó la búsqueda durante la madrugada del martes al miércoles. La carretera donde le localizaron era conocida por el enfermo de Alzheimer porque en sus visitas a Zamora, donde vive la familia de su esposa, ha recorrido «muchas veces el Alto de San Isidro y las proximidades porque en ese barrio vivieron mis padres ... cientos de veces hemos caminado por Guimaré...», recordaba con nostalgia Celia Hernández.

En las tareas de búsqueda del hombre participó una docena de agentes de la Guardia Civil, la patrulla canina del mismo cuerpo, así como fuerzas de la Policía Nacional, la Municipal así como voluntarios de la Asociación de Enfermos de Alzheimer y de Cruz Roja «a los que agradecemos de corazón su colaboración», enfatiza Celia Hernández que agrega: «sabía que los agentes (de la Benemérita) lo iban a encontrar, unos agentes que en San Sebastián no son queridos y que nos han devuelvo a Isaac».

Los allegados han observando «cierta falta de coordinación entre las fuerzas del orden público porque no habían avisado a Protección Civil». Además, la familia quiere dar las gracias a los zamoranos por su apoyo y respuesta. «Hemos recibido muchas llamadas facilitándonos pistas» en cuanto situaron carteles con la fotografía de Isaac con varios números de contacto; al tiempo que indican que, ahora, que ya se sabe que ha aparecido «nos telefonean para conocer cómo se encuentra», explica la esposa del enfermo.

El hombre de 73 años se despistó en la plaza de la Constitución el lunes a media mañana «cuando le deje un instante solo», explica su mujer. De inmediato, sus familiares acudieron a la Subdelegación del Gobierno y a la Policía Municipal para indicar la situación de Isaac, «pero nos dijeron que hasta las 24 horas no podían hacer nada». Mientras tanto se afanaron por hallar a Isaac.

Pasada la primera noche, «una noche en la que hizo mucho frió», menciona Celia, la esposa comunicó la desaparición a los tres hijos del matrimonio, que se desplazaron de inmediato desde San Sebastián y Pamplona para colaborar en la búsqueda del progenitor, una tarea a la que ayer se iban a sumar familiares que residen en Navarra.

La familia tiene previsto hoy retornar a su domicilio en San Sebastián «si Isaac sigue como hasta ahora», asegura la esposa. Entre las primeras cosas que harán al volver «será acudir al médico y hacerle una nueva analítica para comprobar que está bien», confirma Celia todavía conmocionada por los hechos.

El hombre de 73 años padece Alzheimer desde hace siete años, pero la medicación ha hecho que «no le haya avanzado muy rápidamente», según explica la esposa que menta otro susto. En esa ocasión estaban en Benalmádena de vacaciones y «en la entrada del hotel se despistó, pero enseguida volvió», recuerda Celia.

¿Volverán a Zamora? «Si la enfermedad de Isaac lo permite sí, aquí tenemos a parte de la familia y, sobre todo, los zamoranos se han volcado con nosotros», sentencia emocionada Celia Hernández.