Zamora honra al protector de la garganta

Cientos de devotos acuden a comprar las cintas bendecidas y a adorar la reliquia de San Blas en la iglesia de San Vicente

Devotos compran cintas  bendecidas. | E. F.

Devotos compran cintas bendecidas. | E. F. / Natalia Sánchez

Natalia Sánchez

Natalia Sánchez

La tradición popular otorga a San Blas, quien fue martirizado alrededor del año 316, la realización de curaciones milagrosas, como la de un niño que se estaba ahogando al haberse atragantado con una espina, una sanación realizada con dos cirios colocados en forma de cruz. Este hecho sería el origen de la veneración de San Blas como protector e intercesor ante las enfermedades y dolencias de garganta.

Zamora honra al protector de la garganta

Un hombre adora la reliquia de San Blas / Natalia Sánchez

Ese veneración se mantiene muy viva en la ciudad como pudo comprobarse el viernes en San Vicente, donde decenas y decenas de personas acudieron para honrar la reliquia, en las dos misas celebradas en la jornada con la imagen del santo situada a los pies del presbiterio, y, sobre todo, para adquirir las cintas bendecidas que se comprar para uno mismo y para sus familiares.

Zamora honra al protector de la garganta

Varias personas adquieren las cintas bendecidas / Natalia Sánchez

Es el caso de Virginia Esteban quien atestigua que acude todos los años “por fe” y “porque es algo que me inculcó mi abuela”. “Se las compro a mis padres y a mis hijos” explica mientras que comenta el color que desea para las cintas. Y es que diseminada por una amplia mesa había cintas de múltiples colores, desde rojos, amarillo, verde, azul, rosa... a un euro el paquete de dos.

“Deme 16 cintas de varios colores”, pedía un hombre a una de las colaboradoras de la parroquia que atestigua que acude gente de “desde distintos puntos de la ciudad e incluso de pueblos. Es una verdadera tradición”.