Setenta y nueve plazas de alojamiento están a disposición de los refugiados ucranianos en Zamora, de un total de 2.563 plazas de vivienda reservadas en todo Castilla y León, 2.493 de ellas ofertadas por la Junta y las entidades locales y 70 por las ONG de la comunidad.

Zamora, por cierto es la provincia que menos plazas de alojamiento ofrece, ya que 183 son en Ávila; 457 en Burgos; 123 en León; 482 en Palencia; 338 en Salamanca; 315 en Segovia; 209 en Soria; 307 en Valladolid y 79 en Zamora.

La información la facilitaba, Carlos Fernández Carriedo el portavoz del Ejecutivo autonómico, después del Consejo de Gobierno, tras señalar que los refugiados llegan a través de una vía formal mediante el Gobierno y las oenegés, pero también de manera informal con asociaciones, ayuntamientos y particulares.

DIRECTO | Sigue la última hora de la guerra en Ucrania

“No es obligatorio que nos lo comuniquen, ni hay un registro previo, sino que será posterior cuando ellos soliciten su acceso al sistemas sanitario, educativo u otros”, sostuvo Carriedo, quien declaró que la condición de refugiado por Ucrania “es prácticamente automática”, en base a una directiva europea.

El consejero recordó que a las 15 medidas anunciadas en el último Consejo de Gobierno para apoyar la ayuda humanitaria y la repercusión de la llegada de refugiados a Castilla y León, hoy se suman otras nueve que “van en esa dirección” y que son consecuencia de la Comisión Interconsejerías creada para este conflicto y que se reunió este miércoles.

Acceso a la sanidad

Carriedo detalló también cómo se articula la atención sanitaria para los refugiados ucranianos. En este sentido, avanzó que la Junta ultima la preparación del acceso de los refugiados al sistema sanitario autonómico. “La idea es incluirlos en la base de datos de usuario para que puedan recibir atención cuando lo precisen”, explicó, para aclarar que no contarán con una tarjeta física, sino un documento de desplazamiento temporal que agilizará el procedimiento.

De esta forma, aún sin tarjeta sanitaria, las personas procedentes del conflicto ucraniano podrán acceder a la cartera de servicios de la sanidad pública en Zamora.

Otro punto aprobado este viernes se refiere a la atención hospitalaria. Para ello, se han habilitado 149 camas en planta, de unidades de críticos intensivos (UCI) y de pediatría. Carriedo añadió que seis de ellas son para menores con problemas oncológicos en base a las informaciones que maneja la Junta, que se instalan en los hospitales de Burgos, Salamanca y Clínico de Valladolid, con dos en cada centro. Incluso señaló que ya ha habido algún menor atendido en el sistema sanitario por dificultades sobrevenidas de problemas oncológicos, pero sin requerir ingreso.

Familias

Con respecto a las familias, con lo que se han creado dispositivos para atender a los menores no acompañados que “precisen protección, categoría superior a la de refugiado”. Recordó que ya fueron trasladados a un centro de menores en los últimos días los niños que se encontraban en un campamento en El Tiemblo (Ávila). El consejero matizó también, en esta categoría, que en materia educativa el principal hándicap será el idioma y, por eso, se establecerá una etapa primaria de conocimiento en los casos necesarios.

Coordinación entre todas las instituciones y las ONG de la comunidad

Según informó el consejero portavoz, Carlos Fernández Carriedo, se ha activado el convenio de acción humanitaria firmado entre diez comunidades autónomas (entre ellas Castilla y León) con la Agencia Española para la Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) para el apoyo in situ en las fronteras ucranianas y “poder llegar con los recursos al territorio en las mejores condiciones posibles”. Añadió que se han liberado los primeros 400.000 euros con destino a prestar este tipo de ayuda sobre el terreno.

Guerra de Ucrania | Líneas principales de ayuda a los refugiados ucranianos en Zamora L.O.Z.

Otro punto dentro de esta estrategia de apoyo a los refugiados ucranianos será la coordinación que mantendrán la Junta de Castilla y León, la Delegación del Gobierno, las entidades locales y las organizaciones del Tercer Sector y que se reunirán la semana que viene para intercambiar información y poner en común estos dispositivos.

De momento, eso sí, no hay un cálculo siquiera aproximado del número de refugiados ucranianos que puede llegar a Castilla y León.

Carriedo recordó también la crisis económica sobrevenida en sectores productivos como la agricultura y la ganadería, motivo por el que el consejero del ramo en funciones, Jesús Julio Carnero, pidió la celebración de una conferencia sectorial por la “preocupación generada ante el crecimiento del precio de los inputs que ha supuesto un encarecimiento de los costes necesarios que precisan agricultores y ganaderos”. Este encuentro tendrá lugar el próximo miércoles.

Una web de ayuda en dos idiomas, castellano y ucraniano

Desde este mismo viernes funciona ya en la web de la Junta de Castilla y León, con un acceso específico, un enlace de información sobre la crisis en Ucrania, que persigue “canalizar toda la información útil y ver las vías de colaboración”, como ocurrió al inicio de la pandemia del Covid-19, según recordó.

Cuenta con un acceso directo y un banner (en la web www.jcyl.es/ucrania), para conocer al detalle cómo colaborar desde Castilla y León y cómo solicitar esa ayuda desde Ucrania, por lo que la guía estará traducida al idioma ucraniano, que es completamente diferente al castellano, ya que utiliza incluso distinto alfabeto.

En ese perfil se ofrecerá información sobre la ayuda humanitaria in situ, pero también sobre la acogida de refugiados en la comunidad y otro tipo de documentación diversa de todas las consejerías implicadas en el operativo y que tocan materias vinculadas a los servicios sociales, la educación, la sanidad, la vivienda, la economía y el empleo, entre otros. Se incluye además información de interés no sólo de la Junta, sino también la generada por el Ministerio y otras administraciones.