Tras su derrota por un pírrico 1-0 en tierras leonesas, el Zamora CF volvió ayer al trabajo con la vista puesta en cumplir con su objetivo más inmediato, sumar la primera victoria de este 2015, este mismo fin de semana. Aunque, por desgracia, alcanzar tal meta parece bastante complicado ya que enfrente estará uno de los equipos más en forma de la categoría: Un Guijuelo que, además, acostumbra a ser la "bestia negra" de los rojiblancos.

Si bien es cierto que en su último desplazamiento liguero a tierras chacineras el conjunto de Roberto Aguirre obtuvo la victoria (0-2), el Zamora no ha ganado nunca en el Municipal de Guijuelo. Y puntuar, en pocas ocasiones más, siendo el balance muy favorable a un plantel verdiblanco que se ha impuesto en el 75% de las ocasiones que se ha enfrentado a los zamoranos.

Pero, si la historia no es muy halagüeña, la actualidad tampoco se queda atrás. El Guijuelo es el segundo clasificado de la liga y lleva nada menos que trece jornadas sin conocer la derrota. Una racha en la que los salmantinos solo han cedido seis puntos en su feudo con tres empates (Valladolid B, Burgos y Sporting B). Además, dos de ellos fueron en las primeras jornadas.

Pero, pese a la fabulosa trayectoria del Guijuelo y los negativos precedentes con los que cuenta el Zamora frente a él, los rojiblancos comenzaron con brío ayer la preparación del partido. Muy motivados y con ganas de resarcirse de la imagen ofrecida en el Reyno de León.

Una jornada de entrenamiento marcada por el frío y en la que los jugadores se ejercitaron con normalidad.