Un horno limpio es un reto, lo sabemos, pero va más allá de la estética. Es una cuestión de higiene y seguridad en nuestra cocina. Su limpieza regular no solo mejora la calidad de los alimentos cocinados, sino que también prolonga la vida útil del horno y previene riesgos de incendios o malos olores.

Aquí te mostramos cómo puedes limpiar el tuyo sin necesidad de mucho lío: nada de desatornillar ni de quitar la puerta para poder limpiar a fondo. Ojalá te sirva.