Los trucos más sencillos para despedirte de las arrugas de las camisas sin tener que planchar

Podrás ir hecho un pincel con estas rápidas técnicas

Camisas en un comercio.

Camisas en un comercio. / Pixabay

P. O.

Planchar las camisas es un auténtico engorro. Además es una prenda que debemos tratar con especial cuidado a la hora de pasarle la plancha porque con cualquier descuido la podemos estropear.

Esta prenda requiere sí o sí un planchado porque se arruga muchísimo en la lavadora, pero hoy te traemos unos cuantos truquitos para que la dejes impecable sin tener que usar una plancha. Podrás deshacerte de todas las arrugas con estas sencillas y rápidas técnicas.

La ducha

Cuelga la prenda en el baño mientras te das una ducha caliente. El vapor generado en la ducha ayudará a relajar las fibras de la tela y a eliminar las arrugas. Una vez terminada la ducha, estira suavemente la camisa con las manos y déjala secar en un lugar adecuado. 

El truco de la percha y el peso

Extiende la camisa en una percha de forma regular y coloca un peso en la parte inferior de la prenda, como una botella de agua llena. La gravedad hará su trabajo y las arrugas se suavizarán progresivamente. Asegúrate de que la camisa esté bien estirada y que el peso no sea excesivo para evitar deformaciones o roturas imprevistas.

El secador del pelo

Humedece ligeramente las áreas arrugadas con un poco de agua, luego ajusta el secador de pelo en la temperatura más baja y dirige el aire caliente hacia las arrugas mientras estiras suavemente la tela con las manos. A medida que el calor seca la humedad, las arrugas se desvanecerán y tu camisa parecerá más lisa.

La toalla caliente

Este truco tendrás que utilizarlo en prendas más delicadas. Moja una toalla limpia con agua caliente y escúrrela bien. Luego, coloca la toalla sobre la camisa arrugada y presiona suavemente con las manos. El vapor generado por el contacto del agua caliente con la tela ayudará a relajar las arrugas. Una vez que la toalla se enfríe, retírala y deja secar la camisa al aire.

Vaporizador portátil

Cuelga tu camisa en un lugar adecuado y pasa el vaporizador suavemente por la prenda. En este caso tendrás que dedicar algo más de tiempo para dejarla sin arrugas, pero siempre será más cómodo que una plancha.