Dignificar el valioso patrimonio artístico y cultural toresano. Este es el objetivo prioritario de la Fundación González Allende que, en las últimas décadas, ha impulsado y financiando la restauración de centenares de piezas, entre esculturas, pinturas, obras de platería y grabados, al margen de otras destacadas actuaciones en iglesias y monasterios de la ciudad.
A la larga lista de obras de arte rehabilitadas, la Fundación González Allende suma ahora otros tres lienzos de las parroquias de San Julián de los Caballeros y San Juan Bautista de Tagarabuena, que han sido restaurados en Madrid por el especialista Germán Pérez, para ponerlos en valor y evitar su posible desaparición, ante el avanzado estado de deterioro que presentaban.
Dos lienzos pertenecen a San Julián de los Caballeros y estaban “encastrados” en la pared de escayola de la sacristía del templo. Ambas obras presentaban un notable deterioro, tanto en su soporte como en su apariencia y, por el paso del tiempo, habían adquirido un tono negruzco que impedía apreciar las escenas y personajes que recrean.
Uno de los lienzos restaurados de San Julián de los Caballeros representa a San José con el Niño Jesús, mientras que el segundo está dedicado a la Virgen del Rosario.
El tercer lienzo restaurado gracias a la mediación y la financiación de la Fundación González Allende pertenece a la iglesia de San Juan Bautista del barrio de Tagarabuena y recrea la imagen de San Pío V en el que, además, aparecen reflejadas las reliquias que del santo se conservan en el templo.
Los trabajos de recuperación de las tres obras han sido ejecutados por un especialista en restauraciones en lienzo y han consistido en su reentelado, aunque también se ha procedido a cambiar el bastidor. Las tres obras también han sido objeto de una exhaustiva limpieza y se han reintegrado aquellas partes que así lo requerían.
Los tres lienzos no son las únicas obras restauradas en los últimos meses por la Fundación González Allende, ya que también ha impulsado y financiado la rehabilitación de otras piezas en templos que pertenecen a la Unidad de Acción Pastoral de Toro.
La entidad también ha sufragado los gastos de rehabilitación de la escultura de San Antonio Abad, que pertenece a la iglesia de Villalonso, así como la intervención que precisaba la imagen de Santa Águeda de la parroquia de Pinilla de Toro, para garantizar su conservación por su avanzado estado de deterioro.
La Unidad de Acción Pastoral de la Ciudad de Toro ha agradecido el ingente trabajo desarrollado por la Fundación González Allende y su presidente, José Navarro Talegón, porque desde hace décadas velan por la conservación del patrimonio local y del que atesoran parroquias del alfoz.
La Fundación fue creada en 1847 con un carácter benéfico-docente, aunque también se ha involucrado activamente en la protección del patrimonio toresano.
