Las Capas, todo a punto

Una docena de cofrades descienden el Cristo del Amparo en la iglesia de San Claudio de Olivares

El grupo de colaboradores junto a la imagen

El grupo de colaboradores junto a la imagen / J. L. F.

N. S

La cita se mantiene de un año a otro. El Martes Santo por la mañana, una docena de hermanos de la Penitente Hermandad se reunieron para efectuar los preparativos necesarios para que la hermandad salga a la calle la noche del Miércoles Santo.

El proceso comenzó en la panera de las Capas donde han ayudado al cotanero a concluir la preparación de los faroles y de otros elementos que se emplean en la procesión. A continuación, desde su local trasladaron las andas hasta el templo cercano templo de San Claudio de Olivares.

En la iglesia románica y siguiendo las indicaciones del jefe de paso, Félix Gómez, comenzó el descenso de la imagen con mucho cuidado y con la pericia de haber realizado la operación en más ocasiones.

Posteriormente, tras eliminar con cuidado el polvo que pudiera tener acumulado, lo situaron en la sencilla estructura que simula El Gólgota y como único adorno tiene una calavera y unos cardos, que llevan secos varios meses, según han descrito fuentes de las Capas.

La imagen del Cristo del Amparo está del año 1787 según consta en los libros de cuentas parroquiales, y que se atribuye al artista José Cifuentes. Es de tamaño natural, de rostro sereno, que acaba de expirar. y la cabeza, ceñida por una corona de espino natural, se muestra inclinada hacia el lado derecho, pómulos inflamados y boca entreabierta.

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