Más bien se podría titular ésta carta "Edificio en ruinas... ¡Vendido!", cuando digo en ruinas, es en ruinas. Parece increíble que, un edificio histórico de la década de los 50, ubicado la zona más bonita de la capital, en el corazón de la Plaza de Sagasta, enclave donde se localizan varios edificios de una altísima calidad histórica y arquitectónica, modernistas, eclécticos, con unos imponentes miradores de madera o escayola... Esté abandonado y relegado a mostrar fotografías o imágenes de la ciudad en sus imponentes escaparates comerciales que una vez vieron entrar a las personas más elegantes de la capital. A día de hoy, hay una zona restringida por los numerosos desprendimientos de cornisas y balcones de la preciosa fachada.

¿Se merece éste edificio haber sido abandonado de tal manera? Si el edificio fuera una persona, sin duda habría solicitado una indemnización por haber acusado su abandono, tanto por parte de los propietarios, como por parte del ayuntamiento. En realidad dicho abandono no es más que la punta de un iceberg, ya que hay otros edificios en la capital de índole histórico que están marginados y pidiendo ayuda para ser rehabilitados, por ejemplo un par de edificios modernistas que hay en las inmediaciones del Mercado de Abastos, en este caso uno de ellos sufre la rotura de la pintura exterior y está completamente ajada y desquebrajada. Volvemos a la espiral del típico cometario que se escucha en las calles de la "Bien Cercada": "Zamora está abandonada y los gobiernos no hacen nada por la ciudad". Cuando uno piensa acerca de éste comentario, u otros, considera que es la realidad, ya que simplemente hay que dar un paseo por la ciudad.

Cuando en el año 2009 la ciudad de Zamora entró en la Ruta Europea del Modernismo, muchos pensamos que se iba a hacer un esfuerzo por rehabilitar y acondicionar esos edificios que hasta entonces se habían considerado viejos y/o polvorientos, el equipo de gobierno que por aquel entonces se albergaba en el consistorio consiguió colocar notablemente a capital en el mapa, pero parece que aquello quedó en el olvido y el título de Ciudad Europea del Modernismo se le vino grande a Zamora. A día de hoy nadie promociona dicho título, nadie se aprovecha de semejante privilegio y los edificios modernistas, ecléticos o históricos han quedado en el abandono, como el Edificio Caja Duero situado en la Calle Santa Clara. ¿Tanto cuesta pintar sus fachadas e iluminarlas? ¿Tanto cuesta dar a esos edificios un lugar digno?

La "Casa Andreu" quedó preciosa, con su rehabilitación y posterior iluminación, consiguió ser un icono de Zamora y muchos pensamos que aquello sería un efecto dominó e iba a suceder lo mismo con el resto de edificios emblemáticos... Con esta actitud apática, dejando caer el Puente Románico, abandonando los edificios modernistas, permitiendo que la Muralla esté sin rehabilitar, sin iluminación... Y un suma y sigue de marginación por parte de las instituciones o gobiernos, estamos propiciando que la capital vaya cuesta abajo, como el tango de Gardel. El patrimonio de la ciudad es lo más importante que tenemos, no solo es nuestra carta de presentación, es nuestra fuente de ingresos. Por favor, aprendamos de nuestra vecina Salamanca y algún día la UNESCO nos dará lo que tanto deseamos.