Farmacéuticas

Bayer se desploma en bolsa el 18% tras el fracaso de un fármaco en fase III que impulsaba

El varapalo bursátil llegó casi al 21% en algunos momentos de la sesión, el mayor de toda la serie histórica

Bayer

Bayer / BAYER

Eduardo López Alonso

Las acciones del grupo químico y farmacéutico alemán Bayer se desplomaron este lunes el 18% tras reconocer el fracaso de su nuevo medicamento Asundexian, en fase III de desarrollo, y que prometía elevar la facturación del grupo en 5.000 millones de euros anuales. El varapalo bursátil llegó casi al 21% en algunos momentos de la sesión, el mayor de toda la serie histórica, según Reuters. En términos anuales, Bayer tiene una valoración bursátil un 40% menor.

El índice selectivo de la Bolsa de Fráncfort cayó este lunes el 0,11%, hasta 15.901,33 puntos. Un estudio pesimista sobre con el medicamento anticoagulante Asundexian, que pretendía ser solución para reducir el riesgo de derrame cerebral, y un nuevo revés jurídico en EEUU por el glifosato fueron suficientes para socavar cualquier confianza de los inversores.

La empresa alemana ha decidido cancelar el desarrollo de Asundexian, con lo que se evidencia el fracaso de inversiones importantes y debe recalcularse ruta ante una perspectiva de ingresos menor a lo esperado. Los resultados finales, de fase III, no han logrado alcanzar los objetivos esperados, y han demostrado efectos inferiores a los fármacos de competidores como los de Bristol-Myers y Pfizer.

Los analistas de Morgan Stanley destacaron "el aspecto negativo significativo" del anuncio. JPMorgan prevé que la caída puede prolongarse todavía en la sesión de mañana hasta un 10% más. En cualquier caso serán los inversores los que ratifiquen o no estas previsiones.

Sector farmacéutico

El sector farmacéutico europeo está en situación compleja, pendiente de cambios legislativos y la presión cada vez mayor de la competencia estadounidense y asiática en el desarrollo de nuevos fármacos. En el caso de Alemania la situación se agrava todavía más, ya que anota un crecimiento económico débil y al borde de la recesión como consecuencia de costes energéticos elevados y mayor competencia para sus productos en los mercados internacionales. La crisis del automóvil térmico también salpica al resto de sectores, como el sector químico.

Las acusaciones de efecto cancerígeno del herbicida glifosato de Monsanto, adquirida por Bayer, es un lastre inoportuno para la multinacional alemana. Este mismo fin de semana un jurado de Missouri, en Estados Unidos, ha condenado a la empresa alemana al pago de 1.375 millones de euros en indemnizaciones. Y las sentencias pueden ir a más en el futuro.