Derrota por la mínima del Atlético Benavente para despedir una temporada histórica. Quizás el último encuentro haya sido un fiel reflejo a la temporada del cuadro benaventano que ha demostrado que pese a ser un recién ascendido y contar con varias limitaciones, ha competido todos y cada uno de los encuentros de la Segunda División, incluido este último ante un Manzanares que llegaba a Benavente jugándose entrar en Play Off.

A las 17:30 debido a la jornada unificada establecida por la Real Federación Española de Fútbol comenzaba el encuentro con la novedad de Tomás Santiago en portería. El capitán del cuadro atlético, debutaba así en la categoría de plata cuajando una gran actuación. Los primeros 20 minutos al igual que en el encuentro de ida fueron de igualdad máxima. Con ocasiones para ambos equipos y un ritmo de juego alto y con decisiones arbitrales muy protestadas por los locales.

Quedaban algo más de 10 minutos de la primera mitad y los locales ya sumaban 5 faltas en su casillero. Sergio Hernández y Malaguti tendrían las más claras de los benaventanos hasta que en el minuto 15, David Novoa conseguía conectar con Sergio Hernández en el rincón quien devolvía el balón al joven ala para anotar casi a puerta vacía y poner el 1-0 La euforia local contrastaba con el nerviosismo visitante, que veía de reojo lo que ocurría en Ceuta entre los caballas y el Mengíbar. A falta de dos minutos para el final, un saque de esquina manchego terminaba en las botas de Chus que con un fuerte disparo cruzado ponía el empate con el que se llegaba al descanso.

El paso por vestuarios cambió el guion del partido y la expulsión de Iván por doble amarilla precipitó los acontecimientos. En el minuto 25, cuando los benaventanos defendían con un jugador menos, los visitantes aprovechaban un error en la salida del balón y Jorge Lázaro ponía el 1-2 en el luminoso. Un gol que sentó mal en el seno atlético ya que apenas unos segundos después, Otero anotaba a placer desde la frontal para poner dos goles de distancia y obligar a los locales a pedir tiempo muerto.

En la reanudación, una falta cercana al marco visitante servía para que Novoa recortase distancias con una jugada de estrategia cuando restaban casi 15 minutos para el final. Antoñito estrellaría un balón al larguero antes de anotar el cuarto gol manchego de disparo cruzado para finalizar una nueva transición, un arma que los de Juanlu Alonso supieron explotar a la perfección en la segunda mitad. A falta de 10 minutos para el final, una nueva transición visitante terminaba con el balón al segundo palo y Alvarito con calidad ponía el balón cerca del larguero para poner el 2-5 y romper el partido.

Pero el gen competitivo de los locales no desapareció ni con una diferencia de 3 goles en el marcador. A falta de 8 minutos para el final, los de Javier Hernández, Chema Sánchez cumplía su segundo partido de sanción en la grada, apostaban por el portero jugador. No tuvo el peligro de otros partidos como ante El Ejido, pero, aun así, Malaguti ponía el 3-5 con un fuerte disparo a falta de un minuto y ponía a los de Benavente en el partido tras anotar un doble penalti a falta de 15 segundos para el final.

Jaleados por los más de un centenar de espectadores que disfrutaron del encuentro, los de Benavente tuvieron la última oportunidad en las botas del propio Malaguti, quien no pudo finalizar con acierto un balón al segundo palo.

Al final, derrota, más dulce que amarga para un equipo que pone punto y final a una temporada histórica, la del debut en la Segunda División donde seguro que han sorprendido y para bien a numerosos aficionados al fútbol sala. Ahora a descansar, planificar la próxima temporada y la competición les pondrá de nuevo en su lugar.