Más complicada que nunca. Así se presenta este año una División de Honor Plata que, si ya tenía visos de ser difícil de por sí debido al cambio de sistema previsto y aplazado para la próxima campaña, encuentra en un nuevo formato y un apretado calendario dos dificultades enormes. Dos retos a tener en cuenta como también el potencial de las diversas plantillas que conforman este año la categoría.
El Zamora Rutas del Vino peleará por llegar lo más arriba posible en dos fases bien diferentes pero entrelazadas que, además, pueden llevar al grupo a acumular más kilómetros de viaje que nunca. La primera, tendrá a los zamoranos viajando por el sur de España al haber quedado encuadrados en el Grupo B que comparten con andaluces y madrileños, así como también visitarán a Amenabar Zarautz y BM Torrelavega en el norte.
La primera parte de la liga, que abarca de septiembre a marzo de 2021 se antoja fundamental pues, tras la disputa de nueve duelos a ida y vuelta, los cinco primeros clasificados se librarán de pelear en la segunda fase por el descenso. Además, los resultados obtenidos se arrastrarán a la segunda parte de la liga, por lo que hacer un buen papel desde el inicio facilita el tramo final de la temporada.
La recompensa por brillar en un intenso primer tramo de competición (está previsto que se jueguen nada menos que nueve partidos antes de diciembre) tiene especial peso en el grupo que después peleará por el descenso, ya que serán cinco los equipos que bajen de categoría al final de la campaña.
La pelea inicial no será sencilla para el Zamora Rutas del Vino, que tendrá que medirse a conjuntos que se han reforzado muy bien y parten con intención de asomarse a la élite. Un grupo de rivales entre los que figura el BM Torrelavega de Alex Mozas, el BM Antequera de Loren Ruiz o el BM Alarcos de Javi Laguna. Además, estarán los siempre competitivos Amenabar Zarautz, BM Alcobendas o Cajasur Córdoba para intentar complicar la vida a los pistacho.
A partir de ahí, el desarrollo del campeonato dirá contra que equipos del Grupo A (en el que están escuadras de alto nivel como Atlético Novás, FC Barcelona B o SD Teucro, así como viejos conocidos como Handbol Bordils o UE Sarriá) se medirá por alcanzar la gloria o salvar el pellejo.
Toda una aventura en la que, como siempre, la afición zamorana tendrá la oportunidad de reencontrarse con jugadores que algún día vistieron la elástica de los “Guerreros de Viriato”. Diego Reyes, ahora en Antequera; y Marc Abalós, Fafa Cangiani y Jaime Gallego, los tres con el BM Torrelavega, visitarán seguro el Ángel Nieto esta temporada. El otro expistacho, Dalmau Huix, ya lo hizo en pretemporada y podría repetir más adelante con el UBU San Pablo.
