El vigente campeón continental y mundial de K-1 200 metros Carlos Garrote señaló ayer en el embalse de Trasona que su punto de mira "está puesto en Alemania" y que pese a no gustarle perder ayer el selectivo, la prueba no fue más que "la primera toma de contacto en un 2019 muy prometedor".

"Sabíamos que no nos jugábamos nada y veníamos sin presión", afirmó ayer el palista zamorano, añadiendo: "esta es la primera toma de contacto de 2019 y nuestro objetivo prioritario está en Duisburg. Hemos quedado segundos pero no por ello hay que perder la esperanza de hacer algo grande. España tiene un nivel altísimo y nadie te asegura que vayas a ganar siempre. La mira está puesta en Alemania y allí se decidirá todo".

Por otra parte, Garrote, aseguró que hoy remará la prueba de K-1 350 metros por "porque así lo ha decidido del entrenador" ya que para él, "el K-1 200 es el principal objetivo". Por ello, ese selectivo de K-4 lo afronta "sin presión alguna" y con la única intención de "disfrutar".