Ende, la primera mujer pintora de Europa que alumbró Tábara

La localidad zamorana rinde homenaje a la mujer que iluminó el Beato de Gerona concebido en el scriptorium zamorano

Beato de Gerona.

Beato de Gerona. / Jose Luis Fernández

Hace más de mil años, una mujer formó parte de una revolución artística cuya fuerza expresiva no se repetiría hasta las vanguardias de principios del siglo XX. La monja En o Ende, como fue conocida en principio, iluminó el Beato de Gerona, salido del scriptorium del Monasterio de Tábara, junto a otros dos monjes, Senior y Emeterius.

En los estudios figura como la primera pintora occidental de la que se tiene noticia, pero su trascendencia histórica va mucho más allá. Una sola obra le bastó para ganarse la admiración de los expertos por la fuerza expresiva, el uso del color y de las formas que enlazaban directamente con la tradición andalusí.

Una artista que brilló con luz propia

Los especialistas han tratado de ahondar, sin éxito, en la personalidad de una gran artista que brilló con luz propia en la oscura Edad Media, cuando el conocimiento se refugiaba en monasterios e iglesias y estaba solo al alcance de unos cuantos pocos privilegiados.

Tábara la rinde homenaje

Y es que la primera pintora de la historia con firma documentada trabajó para San Salvador de Tábara. Debido a ello, el Ayuntamiento de la localidad zamorana ha convocado el I Premio Internacional de Pintura Femenina "Ende, tabaresa" con el objetivo homenajear la figura de Ende, que aparece en el colofón del Beato de Gerona del Monasterio de San Salvador de Tábara.