Los alumnos del aula de Muga del CRA Tierras de Sayago han terminado esta semana su proyecto de medioambiente “De charca en charca”, un paso para involucrar a los más pequeños en el cuidado de la naturaleza.

Hace unos años que el colegio CRA Tierras de Sayago empezó a trabajar en un proyecto de vida saludable. Uno de sus pilares es la educación ambiental que, este curso, empezó con una salida al campo para recoger basura (Basuraleza), que pasó por realizar una ruta por las cascadas de Abelón y ha terminado con un proyecto para descubrir la cantidad de plástico que contiene el agua de sus charcas (Aulas Libera).

Para ello sería aconsejable cambiar ciertos hábitos de consumo. Por ejemplo, usar esponja natural en lugar de estropajo

De charca en charca es un proyecto que surge de los paseos de los niños por el entorno. En una primera fase, los niños salieron al entorno acompañados de su educador ambiental, Daniel Boyano Sotillo, para hacer un pequeño estudio sobre la fauna y la flora de la zona.

En la segunda fase de identificación, los niños ayudados por Daniel realizaron análisis biológicos, bioquímicos y de plástico en el agua. Los problemas ambientales que identificaron fueron la cantidad de residuos derivados de la ganadería y la agricultura que recogieron. Residuos como ruedas, cuerdas, plástico negro, sacos o las mascarillas, debido al desconocimiento que aún tenemos sobre el tratamiento de los residuos domésticos.

“Soluciona” es la tercera parte del proyecto, en la que se decidió que la mejor forma de ayudar a solucionar estos problemas era difundir los resultados de sus estudios para llegar al mayor número de personas posible. Prepararon una exposición para los alumnos del IES José Luis Gutiérrez y otra para el resto del pueblo en el hogar del jubilado de la misma localidad.

Los jóvenes estudiantes observan la flora autóctona. | M. I. S.

En esta exposición, los alumnos explicaron conceptos como que los residuos derivados de la agricultura y ganadería se consideran residuos industriales y deben ser depositados en el punto limpio.

Además, se hizo hincapié en que las mascarillas se depositan en el contenedor de orgánicos y que las cajas de cartón hay que desmontarlas y depositarlas en el interior del contenedor azul.

Cuando los contenedores de envases y del papel estén llenos no se deben dejar los residuos en el suelo, explicaron los jóvenes que indicaron que en caso de no saber donde depositar algún residuo se depositarán en el contenedor de orgánicos. Sobre las charcas, aún se puede salvaguardar su biodiversidad. Para ello sería aconsejable cambiar ciertos hábitos de consumo. Por ejemplo, usar esponja natural en lugar de estropajo.

Algunos de los residuos encontrados por los niños. | M. I. S.