La reacción “hostil y agresiva” del alcalde de Guarrate, Rafael Sánchez Riesco, hacia la presidenta de la Mancomunidad de La Guareña y alcaldesa de San Miguel de la Ribera, Raquel Pascual, ha sido interpretada por el PSOE de Zamora como “un paso más de Rafael Sánchez Riesco en su integración con el Partido Popular renunciando a la condición de independiente con la que se presentó a las elecciones municipales y en la que lo apoyó el PSOE para que fuera alcalde de Guarrate”.
El secretario de organización del PSOE de Zamora y portavoz en la Diputación Provincial, Eduardo Folgado, ha lamentado el tono del regidor de Guarrate Sánchez Riesco quien “lejos de reconocer su papel determinante en el bloqueo de la Mancomunidad para pasar a formar parte del Partido Popular pretende con falsedades y descalificaciones ocultar su complicidad para no bajar la tasa de basura de los vecinos de La Guareña propuesta por el PSOE”.
El partido socialista asegura en un amplio comunicado que el alcalde de Guarrate “conoce perfectamente la situación de la Mancomunidad de La Guareña que se encontró el actual equipo: una agrupación de municipios que gastaba el dinero en maquinaria inútil, que subía las tasas desproporcionadamente a los vecinos de la comarca y que gastaba el dinero de los ayuntamientos y de sus vecinos sin ningún tipo de control”.
Los socialistas apuntan que “Sánchez Riesco pretende con sus falsedades y tono crispado desviar la atención de lo que realmente ha hecho: juntarse con el Partido Popular para evitar que se bajara la tasa de basura a los vecinos de La Guareña que había subido desproporcionadamente el mismo equipo del Partido Popular con el que ahora se ha aliado”. Aún así, el PSOE asegura que “vuelve a tender la mano a Sánchez Riesco para que rectifique y regrese a su presunta independencia, se aleje del PP y llegue a acuerdos con los ayuntamientos que apuestan por una gestión eficaz, eficiente y transparente, la que no existía en los periodos anteriores con el Partido Popular”.
