Más de una veintena de mayores -a partir de 80 años- recibieron ayer un emotivo homenaje en Bermillo de Sayago. Aunque la iniciativa ya lleva varios años organizándose dentro del programa del verano cultural de "La Mayuela", este año la gran sorpresa ha sido un vals, con el que los organizadores sorprendieron a los mayores cuando salían de misa. La fiesta comenzó con el acompañamiento de los jóvenes a los homenajeados, de tal forma que cada uno de ellos estaba acompañado de su madrina o padrino, que los fueron a buscar a sus casas. Ya reunidos en la plaza, todos juntos entraron en la iglesia de Bermillo para asistir a la misa en el día de Nuestra Señora de la Asunción. La sorpresa llegó cuando, al salir de la parroquia, les esperaba un escenario ambientado con mesas y sillas, y comenzó a sonar el ritmo de un vals. Fue arrancar una pareja e inmediatamente todo el mundo se puso a bailar las dos piezas que sonaron en la plaza. La fiesta concluyó con una paellada para los mayores en un día que volverá a ser inolvidable para los octogenarios de Bermillo de Sayago.