Las lluvias han devuelto a la Reserva Natural de Villafáfila el vigor y el patrimonio avifaunístico que enmarcan a este espacio protegido entre los escenarios ornitológicos sobresalientes del país.

"Después de padecer una de las mayores sequías que se recuerdan en la Reserva Natural, la nieve y la lluvia de los últimos días han dado un giro completo al aspecto de las lagunas y también a los cultivos de la zona. Hemos pasado de poco más de 60 hectáreas inundadas a casi el lleno total en tan solo una semana. Todas las lagunas de la Reserva tienen agua. Además, el agua ha llegado en el momento preciso, ya que en las próximas semanas se produce la entrada a la Península de una gran cantidad de especies que han estado pasando en África los rigores del invierno y que se van a encontrar las lagunas de Villafáfila en muy buenas condiciones" afirman desde Patrimonio Natural de la Junta de Castilla y León.

Para mayor encanto, "muchas de estas especies, se van a quedar en la Reserva Natural para la reproducción, como la cigüeñuela ( Himantopus himantopus), la avoceta ( Recurvirostra avosetta), el archibebe común ( Tringa totanus) o la aguja colinegra ( Limosa limosa)".

La Junta resalta que "además de estas limícolas, es posible observar muchas especies de anátidas. Algunas de paso hacia sus zonas de cría en Europa, como la cerceta carretona ( Anas querquedula) y otras, que años como este se quedarán a criar en Villafáfila, como el cuchara común ( Anas clypeata), el tarro blanco ( Tadorna tadorna) o la cerceta común ( Anas crecca)".

El santuario ornitológico zamorano adquirirá en breve otros atractivos porque, según informa Patrimonio Natural, "están a punto de regresar a la Reserva algunas rapaces que nos acompañarán durante todo el verano, como el cernícalo primilla ( Falco naumanni), el aguilucho cenizo ( Circus pygargus), el milano negro ( Milvus migrans) o águilas como la culebrera ( Circaetus gallicus) y la calzada ( Hieraaetus pennatus)".

Pone de relieve que "otra especie muy llamativa, de la cual ya se han empezado a observar numerosos ejemplares de paso por Villafáfila, es la espátula común ( Platalea leucorodia). De vuelta a sus zonas de cría en Holanda, Bélgica, Dinamarca o Alemania, muchas espátulas hacen escala en Villafáfila, para reponer fuerzas unos días y luego continuar su camino". Señalan desde Patrimonio Natural que "resulta increíble observar la manera que tienen de alimentarse los grupos de espátulas en las lagunas. Como si se tratara de un escuadrón perfectamente organizado, avanzan en formación con el pico sumergido en el agua, buscando invertebrados y anfibios entre el fango y girando al unísono la cabeza a derecha e izquierda, mientras recorren la laguna".

La Junta alerta de otro de los acontecimientos más amorosos y emocionantes que pueden ofrecer aves tan despampanantes como las avutardas. Y es que "la estepa cerealista está a punto de comenzar el espectáculo de las avutardas ( Otis tarda). Si el tiempo acompaña, los últimos días del mes de marzo y todo el mes de abril, son las mejores fechas del año para observar las exhibiciones de los grandes machos de avutarda o barbones, como se les conoce en la zona". La Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, apunta Patrimonio Natural, "alberga la mayor concentración de avutardas de toda Europa, habiéndose censado en los últimos años en torno a 3200 individuos durante la primavera. El espectáculo de la "Rueda" en Villafáfila, que es como se denominan estas exhibiciones de los machos, es perfectamente conocido por ornitólogos de toda Europa, que aprovechan estos días primaverales para acercarse a la Reserva Natural y disfrutar de la observación y la fotografía esta especie tan emblemática y a la vez tan escasa en el resto de Europa".