Iberdrola desarrolla en la actualidad un estudio y proyecto, enmarcado en el programa de Gestión Forestal en Red Natura 2000, que incluye actuaciones de conservación de flora y fauna y accesibilidad en la zona de las Lagunas de Villafáfila (Zamora). Esta actuación supondrá la modificación de tendidos y colocación de elementos anticolisión en dicha área, en el marco del convenio de colaboración suscrito en noviembre de 2008 con la Consejería de Medio Ambiente con el fin de optimizar la integración de las líneas eléctricas en el medio natural.

Según un documento al que tuvo acceso Ical, Iberdrola ha concluido el inventario para la identificación de los puntos de actuación y propuestas de corrección de tendidos eléctricos en las Arribes del Duero (Salamanca) para la protección del águila perdicera en Castilla y León, dentro del Plan de Conservación 2008-2010 de esta especie, promovido por la Consejería a través de la Fundación Patrimonio Natural y gracias al patrocinio de Iberdrola Renovables.

El águila perdicera es la especie más amenazada de la Comunidad y, por ello, el objeto de este plan de actuaciones es detener el declive de la especie en la autonomía, disminuir las causas de muerte de ejemplares y establecer las bases para la restauración del medio rural que favorezca el incremento de especies presa, conejo y perdiz principalmente. En este sentido, se han analizado los tendidos más peligrosos para esta ave y se han hecho propuestas de adecuación en el ámbito de actuación del Plan de Conservación.

El acuerdo entre la firma eléctrica y la Junta contemplaba el desarrollo y ejecución de una serie de iniciativas cuyo objetivo prioritario era la mejora de los entornos naturales en los que se encuentran las instalaciones de Iberdrola.

Los proyectos, que se han desarrollado en 2009 y 2010, dan prioridad a los trabajos de corrección y adecuación de las líneas eléctricas aéreas que se encuentran en zonas de especial protección para las aves de la región, como Villafáfila o Arribes del Duero, para salvaguardar de las mismas a la avifauna, sobre todo a aquellas especies que están amenazadas, como por ejemplo el águila perdicera.

Actuaciones puntuales

Además, se ejecutaron en torno a 46 iniciativas en Castilla y León sobre actuaciones puntuales de modificación de torres eléctricas y la colocación de disuasorios o balizamiento. Entre las principales actuaciones figuran la sustitución de aisladores rígidos de vidrio y cadenas de vidrio por otros de suspensión, cuyo diseño minimiza el riesgo para la avifauna; la adecuación de crucetas para dificultar que las aves se posen en los apoyos eléctricos (torretas); y el forrado de conductores -cables eléctricos- para evitar posibles electrocuciones por contacto.

Al respecto, se cubrieron conductores en Saldaña (Palencia) y Cea (León) y se han colocado elementos disuasorios o anticolisión en la línea Saucelle-Lumbrales, en las localidades de Béjar y Fuenteguinaldo, y en la derivación de Serranos a Valdecarros, todos ellos en Salamanca.

A ellas se unen la colocación de balizamientos en la provincia burgalesa, concretamente en Villafruela y Balbases y en la línea que va de Cardeñajimeno a Carcedo. También en la subestación de Burgos y Villimar, ambas en la capital. Iberdrola también colocó este tipo de elementos disuasorios en Barrillos de Curueño (León).

Asimismo, se sustituyeron aisladores en Carcedo (Burgos) y en Villamuriel (Palencia), mientras que se cambiaron conductores en Puerto de Menga (Ávila), en Fuentes de Nava, Paredes de Nava y Añoza (Palencia), y se adecuaron crucetas en Megeces (Burgos).

Por último, se retiraron nidos de cigüeña de distintos apoyos eléctricos de las poblaciones palentinas de Castrillejo, Villanueva del Río, Manquillos y Frómista, además de Villalonquéjar y Tobe (Burgos). En la primera de las localidades burgalesas se actuó también en un nido de Urraca.