El Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Zamora ha declarado nulo el acuerdo adoptado el 19 de octubre de 2004 por la Mancomunidad de La Guareña para adjudicar el servicio de tanatorio móvil para los ayuntamientos que forman parte de la agrupación. La sentencia judicial se produce después de que el Ayuntamiento de Argujillo presentara un recurso contencioso administrativo solicitando la nulidad de la adjudicación del tanatorio móvil a la empresa Interpyramid «al entender que dicha contratación lo ha sido sin haber seguido el procedimiento legalmente establecido para la modificación de los estatutos de la Mancomunidad», entre cuyas finalidades específicas no incluye la gestión del velatorio. Según se argumenta en la sentencia, «no es posible que la Mancomunidad proceda a adjudicar la prestación de un servicio que no figura entre las competencias de la misma, siendo necesario asumir con anterioridad dicha competencia» y, por lo tanto, iniciar los trámites de reforma de los estatutos.

El alcalde de Argujillo, Manuel de la Rocha, ha mostrado su satisfacción por el pronunciamiento del Juzgado de lo Contencioso, aunque la sentencia no es firme y ya ha sido recurrida por la Mancomunidad de La Guareña. No obstante, de la Rocha justifica su desacuerdo porque el servicio de tanatorio móvil «es un gasto que no tenemos por qué afrontar; esto es un robo a mano armada». Para el alcalde de Argujillo, que dice estar apoyado por otro grupo de ayuntamientos (fundamentalmente los gobernados por el PSOE), el tanatorio móvil resulta «muy costoso». Supone una inversión de 252.000 euros, de los que 180.000 son aportados por la Mancomunidad a través de una subvención directa de la Junta, y los 72.000 euros restantes corren a cargo de la empresa adjudicataria. Manuel de la Rocha asegura que a mayores cada vecino tiene que abonar una tasa anual de 3,5 euros, extremo que ha sido negado tajantemente por el presidente de la Mancomunidad de La Guareña, Clementino Valle, quien ratifica que «este tema se ha tratado en las reuniones y se ha dejado muy claro que el tanatorio tiene un coste cero, tanto para los ayuntamientos como para los vecinos». Lo que cuesta es el uso del tanatorio, «exclusivamente», por el precio de 304 euros, que es lo que tiene que abonar cada vecino que requiera el servicio de la empresa Interpyramid para velar a un difunto.

El presidente de la agrupación de municipios de La Guareña interpreta el recurso del Ayuntamiento de Argujillo «como un tema personal contra mi más que por el hecho de protestar contra el servicio». Las declaraciones apuntarían a una rivalidad que se manifestó desde que el alcalde de Argujillo dejó la presidencia de la Mancomunidad de la Guareña que ahora ocupa Clemente Valle, concejal de El Pego. Sin embargo, de la Rocha se muestra contrario a un servicio «que nos va a costar un dinero que bien se podría destinar a otras cosas en beneficio de los vecinos». Aunque la Junta es la que aporta la subvención de la Mancomunidad para el pago del vehículo que lleva el tanatorio móvil, el alcalde de Argujillo considera que los 180.000 euros «se pueden gastar en cosas mucho más necesarias porque los vecinos no quieren eso». Además, en el caso de Argujillo, existe un tanatorio municipal.

Valle: «Son ganas de meter cizaña»

El presidente de la Mancomunidad de La Guareña asegura que el recurso presentado por el Ayuntamiento de Argujillo no ha paralizado el proceso para la dotación del servicio de tanatorio móvil «porque nadie nos puede prohibir comprar el vehículo». Es más, la agrupación de municipios ya ha aprobado la modificación de estatutos, una vez que los ayuntamientos así lo han ratificado en sus respectivos plenos, y se ha publicado en el Boletín Oficial. Aunque no todos los miembros de la Mancomunidad han secundado el cambio para poner en marcha el tanatorio móvil, sí se ha conseguido el respaldo necesario, como ha confirmado Clementino Valle, quien insiste en el hecho de que «nadie está obligado a usar el velatorio, pero es un servicio que va a estar ahí, a disposición de los vecinos» y añade que la actitud de los contrarios a asumir esta gestión responde a «ganas de meter cizaña». El presidente de la Mancomunidad aclara que la prestación se tramita a través de dos expedientes, uno de compra y otro de gestión, y «nuestra idea es mantener el servicio», aunque está pendiente la resolución del recurso presentando por la propia Mancomunidad contra la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Zamora que declara nulo el acuerdo de octubre de 2004.